Este artículo se publicó hace 6 años.
Santander marca el rumbo de la banca responsable con su canal ético
Banco Santander ha dado un paso más en su empeño por hacer de la entidad un modelo de banca responsable para el sector financiero. El mismo concepto “banca responsable” se ha convertido en la seña de identidad del grupo y en el pilar sobre el que se asienta su estrategia de negocio. Entre otras iniciativas, el banco ha creado el llamado “canal ético” con el fin de asegurar el cumplimiento del Código General de Conducta.
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Madrid-
En unos tiempos en los que la responsabilidad social corporativa y la sostenibilidad están en auge, toma una gran relevancia la ética empresarial, que busca el modo correcto de desarrollar la vida de la empresa. Cuando una compañía se propone ser ética, trata de aplicar unos principios a la hora de tomar decisiones o realizar acciones concretas. Son un conjunto de valores, normas y principios, cuyo objetivo es tener una mayor armonía con la sociedad y permitir una mejor adaptación de los trabajadores al entorno laboral, respetando sus derechos, según se indica en un informe de Eade.
Cumplir unas normas éticas tiene numerosos beneficios para las empresas, tanto internos como externos, y entre ellos se destaca la prevención de situaciones de riesgo ya que los conflictos se tratan de solucionar dentro de la propia empresa y la generación de mayor confianza entre colaboradores, accionistas y clientes.
A este respecto, entre otras medidas, Banco Santander ha puesto en marcha en 2018 un “canal ético” a través del cual los empleados pueden comunicar infracciones del código de conducta del grupo y de su cultura corporativa. Una cultura corporativa puesta en marcha hace tres años que se sustenta en ayudar al progreso de las personas y de las empresas y en cuya definición y desarrollo han participado los más de 200.000 empleados del Grupo. La manera para cumplir con esa misión es actuando tanto a nivel profesional como en la vida privada de un modo “sencillo, personal y justo”, para convertirse así en “el mejor banco para trabajar de todo el sistema financiero internacional”. Para fomentar esta cultura, se han introducido ocho comportamientos individuales concretos: Soy respetuoso, Escucho de verdad, Hablo claro, Cumplo las promesas, Promuevo la colaboración, Trabajo con pasión, Apoyo a las personas, Impulso el cambio. El cumplimiento de estos comportamientos son valorados en el momento de fijar las políticas de bonus retributivos de la plantilla.
El canal ético de Banco Santander está gestionado por una entidad externa independiente para garantizar la confidencialidad y el anonimato de la persona que informa. Hay varias iniciativas para animar a las personas a hablar claro, y se han creado nuevas formas de proteger el anonimato de los empleados. A través de este canal, los miembros de la entidad pueden informar de irregularidades en temas de contabilidad y auditoría de forma confidencial. Únicamente determinadas responsables del área de Cumplimiento pueden revisar el contenido de la comunicación con el propósito de determinar si guarda relación con cuestiones de contabilidad o auditoría, y, en su caso, someterla a la comisión de auditoría.
A todo esto hay que añadir que Banco Santander dispone de un canal de información, no solo ya para los empleados directos del grupo, sino también para cualquier proveedor, mediante el cual, aquellos que presten servicios a la entidad presidida por Ana Botín o cualquiera de sus filiales, pueden informar de conductas inapropiadas por parte de los empleados del grupo que no estén alineadas con el marco de la relación contractual entre el proveedor y la entidad.
En 2018, la entidad presidida por Ana Botín implantó también un canal ético en Argentina, Brasil, Chile, México, Portugal, España y Reino Unido y se establecieron otros dos canales en dos países más dentro del ámbito de Santander Consumer Finance: Alemania e Italia.
Código general de conducta
La política corporativa de Banco Santander tiene como objetivo asegurar que el comportamiento de la entidad se ajusta a los mejores estándares en criterios éticos, de gobierno corporativo, medioambientales y sociales. Banco Santander cuenta con varias normas internas, entre las que destacan el Código general de conducta, la Política de derechos humanos, el Código de conducta en los mercados de valores y la Política social y ambiental. Entre los principios que se recogen en el Código General de Conducta del Grupo destacan el respeto a la igualdad de oportunidades, diversidad y no discriminación, así como el respeto a las personas, el fomento de medidas de conciliación del trabajo y la vida personal y la prevención de riesgos laborales. Otro de los puntos que se incluyen son la protección de los derechos colectivos como son los de sindicación, asociación y negociación colectiva. La cultura corporativa es la base principal en el que se asienta la actividad del Grupo Santander y muestra la forma en que el grupo se relaciona con los empleados, clientes, accionistas y la sociedad.
Por otra parte, Banco Santander está unido a códigos internacionales como los Principios del Ecuador, o la iniciativa financiera del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP FI), que están en línea con la integración de criterios sociales y ambientales en su actividad. Además de las dos mencionadas, entre las iniciativas internacionales en las que Banco Santander está presente están los Principles for Responsable Investment, el Carbon Disclosure Project, el Grupo Wolfsberg, Mesa redonda sobre soja responsable, el Instituto Brasileiro de Governança y el Consejo Estatal de Responsabilidad Social Empresarial del Gobierno español.