Valls criminaliza las protestas de Francia contra la reforma laboral y quiere prohibir las manifestaciones
Los líderes franceses exhortan al sindicato CGT a "sacar de las calles a los alborotadores" y dice que "denegará los permisos" para las concentraciones de no ser así.
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PARÍS.- Líderes franceses dijeron el miércoles al sindicato CGT que denegarían los permisos para más protestas en las calles si no sacaba de ellas a los alborotadores, un día después de los violentos disturbios entre jóvenes enmascarados y policía durante manifestaciones en París.
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El presidente François Hollande dijo a sus ministros que las protestas en las calles que CGT había organizado contra la reforma laboral no serían permitidas si el sindicato no ofrecía mayores garantías de seguridad, dijo un portavoz del gobierno.
Sus palabras llegan dos días después de que un oficial de policía y su mujer muriesen apuñalados por un francés que había jurado lealtad a Estado Islámico.
La policía ha arrestado a más de 60 personas. Muchos de los alborotadores iban vestidos de negro, con bufandas y gafas para repeler el gas lacrimógeno y cascos en caso de haya cargas policiales. Aunque no pertenecen a ningún grupo identificable, los expertos dicen que son una mezcla de jóvenes desilusionados, anarquistas y anticapitalistas.