MADRID
Actualizado:Los ánimos recibidos por Zelenski en su gira europea por Italia, Francia, Alemania y Gran Bretaña han enardecido al presidente ucraniano en la lucha contra la invasión de su país, lanzada por Moscú hace casi quince meses. "Estamos ya casi listos para la contraofensiva", subrayó Zelenski en Berlín, segunda etapa de su periplo europeo.
Pero las palabras no son suficientes para derrotar a los rusos y el presidente ucraniano confía más en las nuevas remesas de armamento conseguidas en este periplo, que refuerzan la capacidad del Ejército ucraniano para lanzar esa contraofensiva e incluso para golpear a Rusia más allá de la línea del frente.
Por eso, Zelenski reclama cada vez más armas contra Moscú. Ahora pide aviones y misiles de largo alcance que puedan dar a Kiev la ventaja en una guerra que, en estos momentos, no parece que vaya a ganar nadie. En esta gira que le ha llevado a Roma, París, Berlín y Londres, Zelenski ha destacado el protagonismo de Gran Bretaña, un país que quiere recobrar el liderazgo en Europa -aunque sea en el ámbito de la defensa- después de autocondenarse al ostracismo político y económico por el Brexit.
Protagonismo británico en Ucrania
Gran Bretaña se esfuerza por marcar rumbo en la guerra de Ucrania con armas de última generación e inteligencia estratégica para Kiev, a la par que debilita cualquier iniciativa que busque una salida política a la guerra y despliega toda una maquinaria de desinformación y propaganda dirigida a Europa.
Reino Unido enviará cientos de misiles antiaéreos y drones de ataque con un rango de hasta 200 kilómetros
En la reunión que han tenido este lunes, el primer ministro británico, Rishi Sunak, le ha confirmado al presidente ucraniano que Reino Unido enviará en los próximos meses cientos de misiles antiaéreos y drones de ataque con un rango de hasta 200 kilómetros.
Este tipo de armamento parece indicado para hostigar sin denuedo a las fuerzas rusas que ocupan una media luna de más de 1.200 kilómetros en el sur y este de Ucrania y para participar en una contraofensiva.
La noticia que confirmó el Gobierno británico la semana pasada de que ha enviado misiles de largo alcance Storm Shadow de producción anglo-francesa, capaces de destruir objetivos a entre 250 y 300 kilómetros, mostró el papel protagonista que ocupa Gran Bretaña en el suministro de armas de gran impacto a Ucrania, al margen de la cautela de otros gobiernos europeos.
Londres no enviará aún aviones, pero entrenará pilotos
Sobre el envío de aviones F-16, Gran Bretaña se manifiesta reacia. Pero no por traspasar límites que puedan enfurecer a Moscú, sino simplemente por razones prácticas y logísticas. Un portavoz de Sunak indicó que de momento el Reino Unido no enviará ese tipo de cazas reclamados por Ucrania, pues no es utilizado por la RAF, la Real Fuerza Aérea británica.
Pero el propio Sunak ha dejado la cuestión en el aire, al señalar que primero se entrenará a los pilotos ucranianos en los cazas de combate occidentales y después ya se verá. "Hemos empezado hoy con ese proceso", dijo el primer ministro británico a Zelenski.
El líder ucraniano busca el apoyo europeo para conseguir las "alas para la libertad" con las que acabar con la superioridad aérea rusa. Superioridad que no ha sido utilizada en todo su potencial por Rusia, más partidaria de los golpes quirúrgicos con sus aviones de combate situados a cientos de kilómetros de los blancos.
El modelo táctico de las fuerzas aéreas rusas en Ucrania está más cerca de sus acciones en la guerra de Siria que el tipo de bombardeo masivo empleado, por ejemplo, por Estados Unidos en Irak. No para evitar víctimas civiles, sino para impedir que sus aviones sean derribados.
No cuaja la propuesta de una coalición que envíe cazas
En este viaje, el presidente ucraniano propuso al canciller alemán, Oleg Scholz, el apoyo de Berlín a una coalición europea que entregue a Ucrania aviones modernos con los que desafiar ese poderío aéreo ruso. Pero Alemania es muy reacia a una escalada de la participación europea en la guerra y prefiere centrarse en los sistemas de defensa antiaérea, que están teniendo éxito contra los misiles y drones rusos.
Alemania dará a Kiev 2.700 millones para adquirir cañones, drones, carros de combate, blindados y sistemas antiaéreos
En compensación, Alemania ofreció un nuevo paquete de ayuda por 2.700 millones de euros, el mayor hasta ahora concedido por Berlín a Kiev, para adquirir cañones, drones, carros de combate, blindados y sistemas antiaéreos. El presidente francés, Emmanuel Macron, también aseguró este domingo a Zelenski el envío de tanques ligeros y vehículos blindados de transporte de personal, ideales para una ofensiva a gran escala.
En todo caso, ni Francia ni Alemania se acercan a la osadía de Gran Bretaña, plasmada en el envío de esos misiles Storm Shadow, capaces de alcanzar el territorio ruso y llevar la guerra a una fase mucho más incontrolable.
Ahora queda ver si Gran Bretaña da un paso más allá y finalmente levanta la veda del suministro de aviones de combate modernos a Ucrania y a la vez anima a sus buenos amigos polacos y centroeuropeos a hacer lo mismo.
Una frase que dejó caer el presidente ucraniano en Londres apuntaría en ese sentido. Sobre los aviones de combate occidentales, pronto se tomarán "decisiones muy importantes", aseguró Zelenski.
Dispuesto a llevar la guerra hasta el corazón de Rusia
El tema de los aviones da muestra de la capacidad que tiene Zelenski para convencer a sus aliados occidentales de una cosa y después hacer otra. El presidente ucraniano había prometido que no utilizaría los misiles de largo alcance contra objetivos en territorio ruso. Sin embargo, según las filtraciones de los documentos del Pentágono, Zelenski está dispuesto incluso a invadir Rusia con sus tropas, bombardear bases militares en territorio enemigo, volar gasoductos y oleoductos rusos, y, aliado con guerrilleros kurdos, atacar a Rusia en Siria, donde Moscú respalda al dictador Bashar al Asad.
Según las filtraciones de documentos del Pentágono, Zelenski está dispuesto incluso a entrar con sus tropas en Rusia
Y entretanto, cada día hay nuevas informaciones sobre ataques con misiles, drones o sabotajes en zonas rusas aledañas a la frontera con Ucrania. Pensar que tales ataques se estén produciendo sin el conocimiento de los aliados más cercanos de Ucrania es simplemente una ingenuidad.
Es precisamente Gran Bretaña el poder europeo con mayor complicidad con Ucrania, siempre dispuesta a respaldar las iniciativas ucranianas para combatir a Moscú. Desde esos ataques en territorio ruso, hasta la guerra de información originada en Kiev y cocinada en Londres.
Londres y la guerra de propaganda
Miles de medios, equipos de análisis y gabinetes ministeriales europeos se hacen eco cada día del "parte" de guerra que da el Ministerio de Defensa británico, con las informaciones suministradas por los servicios secretos ucranianos, y que es distribuido por Twitter y otras redes sociales.
A veces esta desinformación es refinada, pero normalmente adolece de cautela y cualquier analista podría captar que, en el mejor de los casos, los británicos solo cuentan la mitad de la historia. Esa información "retocada" llega también al otro lado del Atlántico y es recogida por la prensa o incluso por el propio Gobierno estadounidense hasta que llega un momento en que ni los propios aliados saben qué es verdad o mentira en esta guerra.
El "parte" de guerra que ofrece Londre se basa en ocasiones en maniobras de desinformación
Por ejemplo, las revelaciones de The Washington Post acerca de un supuesto intento del dueño del grupo paramilitar Wagner, Yevgueni Prigozhin, de traaicionar al Ejército regular ruso para aliviar la presión de los ataques sobre sus propios mercenarios en Bakhmut parecen más el producto de una desinformación del MI6 británico que de un plan urdido por el magnate, cuya cabeza, de existir la mínima duda por parte del Kremlin sobre su lealtad, ya habría rodado. Y literalmente, como ya ha pasado con otros oligarcas de quienes el presidente Vladímir Putin ha tenido la mínima duda.
No obstante, existe la posibilidad, como ha señalado el propio Prigozhin, de que quien esté detrás de ese supuesto montaje sea alguno de sus muchos enemigos en la cúpula del ejército ruso. En todo caso, en Occidente es más útil en estos momentos acusar a Prigozhin de traidor, para desmantelar a los Wagner, que de subrayar las trifulcas en las fuerzas armadas rusas.
¿Te ha resultado interesante esta noticia?
Comentarios
<% if(canWriteComments) { %> <% } %>Comentarios:
<% if(_.allKeys(comments).length > 0) { %> <% _.each(comments, function(comment) { %>-
<% if(comment.user.image) { %>
<% } else { %>
<%= comment.user.firstLetter %>
<% } %>
<%= comment.user.username %>
<%= comment.published %>
<%= comment.dateTime %>
<%= comment.text %>
Responder
<% if(_.allKeys(comment.children.models).length > 0) { %>
<% }); %>
<% } else { %>
- No hay comentarios para esta noticia.
<% } %>
Mostrar más comentarios<% _.each(comment.children.models, function(children) { %> <% children = children.toJSON() %>-
<% if(children.user.image) { %>
<% } else { %>
<%= children.user.firstLetter %>
<% } %>
<% if(children.parent.id != comment.id) { %>
en respuesta a <%= children.parent.username %>
<% } %>
<%= children.user.username %>
<%= children.published %>
<%= children.dateTime %>
<%= children.text %>
Responder
<% }); %>
<% } %> <% if(canWriteComments) { %> <% } %>