Este 30 de noviembre, más de 150 organizaciones se han movilizado en todo el país para exigir un alto el fuego inmediato en Palestina y el Líbano. En Madrid, una manifestación ha recorrido desde las 18.00 horas el trayecto entre Atocha y Callao. Esta protesta está convocada por Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS).

"El mundo occidental y particularmente Europa, supuesta adalid de los Derechos Humanos, está virando hacia un autoritarismo belicista que estremece. El mercado y el complejo armamentístico, mediático, político y financiero pretende imponernos su narrativa del miedo y sumergirnos en una distopia en la que no queremos entrar", dice la convocatoria.

El manifiesto denuncia la impunidad de las acciones de Israel durante los últimos 77 años, incluyendo bombardeos a hospitales, escuelas, campos de refugiados y zonas civiles. También reclama la imposición de un embargo total de armas, el cumplimiento de las resoluciones del Tribunal Internacional de Justicia, y la ruptura de relaciones diplomáticas y comerciales con Israel. Además, los convocantes instan a fortalecer campañas como el Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS), comparando la lucha palestina con la resistencia al apartheid en Sudáfrica.

En el acto de Madrid organizado a las 18 horas, se ha leído un manifiesto de RESCOP que destaca la necesidad de intensificar las acciones desde la sociedad civil para frenar lo que califican como un genocidio planificado.

Según el manifiesto, estas acciones buscan no solo visibilizar la brutalidad del conflicto, sino también ofrecer oxígeno a un pueblo que resiste frente a la adversidad. Los organizadores recuerdan que la lucha del pueblo palestino es "una batalla global por un mundo sin odio, exclusión ni guerra", y llaman a seguir movilizándose para exigir justicia y un cambio estructural en las relaciones internacionales.

Previamente, esta mañana, una concentración en la Puerta del Sol de Madrid ha exigido el alto el fuego inmediato y permanente en Palestina y Líbano. La protesta se organizaba bajo el lema Por la Paz. Alto el Fuego ¡Ya! Ni Terrorismo, Ni Genocidio, y buscaba denunciar la escalada de violencia y abogar por una solución justa y duradera en la región.

Los convocantes, entre ellos sindicatos como Comisiones Obreras y UGT, así como miles de firmantes de plataformas como pararlaguerra.es, han destacado la urgencia de la movilización ciudadana ante la pasividad de la comunidad internacional.