Factura de la luzBono social eléctrico y el nuevo bono térmico: quién puede acogerse y hasta cuándo

Tras la aprobación del bono social eléctrico por parte del Consejo de Ministros, aquellos colectivos más vulnerables podrán verse beneficiados con la medida. Otras decisiones del Ejecutivo han sido la suspensión del impuesto a la generación eléctrica y la derogación del impuesto al sol. Este bono tendrá una rebaja del 25% o el 45% en los costes variables en la factura de la luz y amplía su cobertura anterior.

¿Quién puede beneficiarse del bono?

Solo hay dos supuestos que permiten acogerse al bono: Aquellos hogares en lo que haya casos de violencia machista, víctimas del terrorismo y personas con discapacidad; y, como novedad, también las familias monoparentales que ganen menos de 19.000 euros al año.

Se prohíben los cortes de suministro

El Consejo de Ministros también prohibió el corte de la luz a las familias con el bono social y que tengan menores de 16 años, dependientes de grado 2 ó 3, o con discapacidad del 33% o más.

Sube la subvención al consumo

El máximo de potencia en kwh con derecho a descuento se amplía un 15%, además de poder compensar entre distintos meses.

El nuevo bono térmico

Aquellos que se hayan acogido al bono social también podrán disfrutar del bono nuevo dedicado a la calefacción y el agua caliente. Su coste dependerá de la renta y el clima de cada zona. Además, han reseñado que se podrá aplicar a cualquier tipo de energía.

Plazo de solicitud ampliado

El Gobierno de Sánchez ha aplazado la fecha límite, que era el 8 de octubre, para solicitar el actual bono social ya que la mayoría no lo habían pedido aún. A su vez, las personas que podrán acogerse por primera vez al bono social puede solicitarlo sin límite temporal con la única condición de que su tarifa sea la que regula el Estado, el Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC).

El autoconsumo eléctrico ya no está penado

Después de que Rajoy aprobara el conocido "impuesto al sol", ahora el Ejecutivo socialista ha decidido eliminarlo. De esta forma, reconoce el derecho de los consumidores de utilizar sistemas de producción propios siempre y cuando tengan una potencia inferior a 100 kw.

Así pues, tampoco hará falta la inscripción en un registro administrativo de instalaciones de producción de energía o la obligación de tener un contador adicional para controlar la energía autoproducida.