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Francisco Sánchez Pérez: "Para legitimar la monarquía actual tratan de deslegitimar la República que hubo"

El historiador y profesor ha publicado un libro en el que desmonta todos los argumentos empleados por la derecha para deslegitimar la Segunda República a través de una gran riqueza bibliográfica.

El historiador Francisco Sánchez Pérez junto a su nuevo libro.
El historiador Francisco Sánchez Pérez junto a su nuevo libro. S.Hincapié

El libro El Germinal español: las elecciones que trajeron la Segunda República, escrito por el historiador y profesor Francisco Sánchez Pérez y publicado por la editorial Akal, centra su mirada en las elecciones municipales del 12 de abril de 1931. Mediante un relato accesible y una nutrida base bibliográfica, el historiador especializado en el siglo XX español va desmontando con una gran contextualización los argumentos que la derecha utiliza para deslegitimar la Segunda República.

En una entrevista a Público, Francisco Sánchez Pérez cuenta cómo "en el plebiscito ganaron los republicanos de una manera abrumadora", dando paso a unos resultados irrepetibles en la historia de España.

El libro es una respuesta a aquellos que dicen que la II República llegó gracias a un fraude electoral, ¿por qué considera que hay tanta polémica al respecto, habiendo tantas pruebas históricas, como se observa en su libro?

"Los que se radicalizan antes en su pensamiento político son los profesores universitarios y luego la población"

Porque tenemos una monarquía. Para legitimar el régimen actual, tratan de deslegitimar la República que hubo. Es una tendencia que se ha incrementado con el paso del tiempo. Cuando se recuperó la alternancia política, con una izquierda y una derecha que nunca ha sido republicana en nuestro país, quedó como un régimen que no debería reivindicarse. Estos argumentos se han retomado en el siglo XXI. En los años 80 se consideraba que el argumentario franquista estaba totalmente superado historiográficamente, pero esos tópicos se han retomado. Yo advertí una radicalización derechista en la historiografía española y se ha visto que era un precedente de lo que ha ocurrido en España a nivel político.

Los que se radicalizan antes en su pensamiento político son los profesores universitarios y luego acaba calando en la población. Esto de romper los carteles de Largo Caballero de sus calles viene de ahí. Los argumentos políticos para justificar esas acciones están basados en este tipo de historiografía. Los políticos sí que leen libros de historia, lo importante es qué libros de historia leen. No hay más que ver cómo se usa la historia continuamente en casi todo tipo de parlamentos: el año 34 como el origen de la guerra civil, el franquismo como preparación de la democracia y no como alteración de ella. A nivel político está calando en los medios de comunicación y tratan de darle mucha propaganda a libros de historia que avalan esas tesis y ocultar los que están en contra de ellas.

¿Qué importancia tuvo el discurso apocalíptico dentro de la campaña electoral de 1936?

Gran importancia. Es el precedente de todas las campañas electorales que van a hacer después (la derecha monárquica). Su tono es muy claro: la democracia va a traer el comunismo y el caos. Lo de la dialéctica anticomunista en España viene con Primo de Rivera y se queda. Creen fervientemente que los que están detrás de estas campañas son los masones, los judíos y los comunistas, se puede ver en la extrema derecha, antes y durante la dictadura de Franco, quien lo convirtió en sistema de Gobierno. De la misma manera que hoy creen que detrás de Pedro Sánchez están ETA y Otegui. Esta historia la cuentan dentro de 50 años y dirán: cómo es posible que creyesen que detrás de Pedro Sánchez está ETA.

A mí me ha resultado sorprendente el nivel apocalíptico extremadamente radical que tiene la propaganda monárquica, porque la republicana es bastante moderada. Ellos intentan no hablar de cambios muy concretos, sino de acabar con el caciquismo, la presencia del clero en el Estado y la presencia militar en las calles. Esto último es una obsesión de los periodistas por la represión que ejerce el general Mola desde la Dirección General de Seguridad. Como en el Hospital de San Carlos, la Guardia Civil prácticamente lo bombardeó con niños y profesores dentro a las órdenes de Mola porque los estudiantes querían hacer una manifestación cuando empezase la campaña electoral. Aquí en Madrid hubo muchos incidentes de ese tipo. Parece que todos los problemas de orden público en España comienzan el 14 de abril, pero no se cuenta nada de lo que ocurrió el año anterior.

¿Qué papel jugaron las mujeres dentro de la campaña republicana para el triunfo teniendo en cuenta que no podían votar ni ser elegidas?

"Eran mujeres universitarias, que la extrema derecha odiaba, como hoy con las llamadas feministas radicales"

Las mujeres republicanas era un grupo reducidísimo de universitarias, pero muy importante para la visualización, porque no podían votar, pero acompañaban al electorado republicano y participaban en los mítines, siendo la primera vez en la historia de España que en mítines intervenían mujeres. Además, iban en los camiones, soltaban octavillas y repartían votos. Esto lo hicieron también las católicas y tenían bula porque a las mujeres no se las agredía, era muy difícil. A través de la prensa conozco anécdotas de que a veces sí que se llegaba a las manos, cuando las catequistas monárquicas entraban a barrios obreros era arriesgado, generalmente iban varones que las acompañaban y sí que hubo incidentes. Las asociaciones de mujeres católicas pidieron el voto a favor de la monarquía porque consideraban que era la que soportaba la familia, aunque ellas no podían votar.

Las jóvenes eran enormemente activas, y cuando se dio la victoria electoral Victoria Kent se paseó con todas las mujeres en un camión por Madrid. Fue muy importante para la visualización de que todas las clases sociales en los dos géneros compartían la victoria. Anteriormente en España las mujeres no estaban en las movilizaciones políticas, fue pionero que ahora aparecieran.

Nada más proclamarse la República les dan el sufragio pasivo, es decir, podían presentarse, y después de la Constitución les dan el sufragio activo. La República les abrió varios cargos a las mujeres, pero no todos. Ya estaban llamando a la puerta de los ministerios y del voto, y lo que costó. Eran mujeres universitarias, que además la extrema derecha odiaba, exactamente como hoy con las llamadas feministas radicales, un odio visceral hacia la mujer que estudiaba, que se había vuelto republicana liberal, que era partidaria del sexo libre. No pudieron votar, pero tuvieron un gran protagonismo.

¿Fue la movilización de los jóvenes en la campaña por parte de la izquierda republicana determinante para el triunfo?

Totalmente decisivo. Es como si toda la gente con cierta educación en España y sus hijos que están en la universidad están contra el régimen. Los jóvenes estaban extremadamente radicalizados contra Primo de Rivera y después contra Alfonso XIII, es el problema de no compartir la soberanía. Los juristas, catedráticos y jueces de España están contra la monarquía, hacen oposición desde el Ateneo de Madrid, que era muy importante porque era una especie de actualidad alternativa que en el parlamento no se podía dar porque no había Cortes. Acabarán en el parlamento republicano.

Consiguen arrastrar los votos de los trabajadores, de los barrios obreros, que no se abstengan. Eso significa muchísimos votos. Es decisivo para las elecciones porque con las élites tú no ganas unas elecciones, necesitas todos esos votos, pero a la hora de crear opinión pública que títulos universitarios se sumen a la oposición al régimen es clave, porque no es lo mismo que se opongan los líderes sindicales, que era una amenaza para la clase media. Pero en esto el mundo de los intelectuales y el mundo de la calle no estaban separados, eran parte del mismo tema.

¿Fue determinante que la izquierda republicana fuese unida (con la Conjunción Republicano-Socialista) e hiciera campaña junta para lograr la victoria de la República?

"Sin ganarte a la derecha conservadora es muy complicado hacer un cambio de régimen político en España"

Sí. Lo considero en dos cuestiones. La primera fue cohesionarse más o menos en una coalición. Aunque eso no era nuevo en España, lo habían logrado en 1910 con el Partido Socialista de Pablo Iglesias, pero lo pionero fue atraerse a una parte dinástica liberal que había apoyado la monarquía, como Alcalá Zamora o Miguel Maura, que viene del partido conservador. Aunque no tenían un gran apoyo electoral porque nunca les había interesado realmente las elecciones, sí tenían mucho en la clase dominante, dando viabilidad al cambio de régimen. Sin ganarte a la derecha conservadora es muy complicado hacer un cambio de régimen político en España. Es como ahora, pretender que se pueda crear una república sin que la derecha lo acepte es muy complicado.

En segundo lugar, los catalanes. Consiguieron ganarse a los nacionalistas catalanes, no se ganaron a la Lliga, pero sí a Acción Catalana mediante el Pacto de San Sebastián con el fin de conseguir convencer a los catalanes de que se puede hacer una república de todos, pero en la que se reconozca la autodeterminación de Catalunya, que en la época consistía en votar sus propios estatutos y tener un parlamento propio. En la época sonaba a revolucionario, hoy suena a algo aceptado por todo el mundo. Esto es fundamental para resolver el problema territorial.

¿Cómo consiguieron los republicanos convencer a los dinásticos de derechas para que se uniesen a la república?

Por la dictadura de Primo de Rivera. Gran parte de los monárquicos son retenidos del poder. No gobernó con los monárquicos, gobernó con el ejército. Lo que era el antiguo gobierno conservador o partido liberal quiere volver al poder, pero en otras condiciones.

"El mito de que los monárquicos habían ganado las elecciones se cae por el propio peso de la historia"

Mi teoría es que muchísima gente se vuelve republicana, incluso algunos comunistas o socialistas, como oposición a la dictadura de Primo de Rivera. La punta de lanza son las universidades donde se creaba la intelectualidad española y los jóvenes de clase media que querían que cayese el rey que le había dado apoyo al dictador.

Entonces, hay dos claves. Por un lado, gran parte del personal que apoyaba la monarquía ya no lo hace. Por otro lado, hay un frente común muy amplio con gran apoyo cultural y social. Además, las elecciones, que eran plebiscitarias, dan un resultado muy contundente. El mito de que los monárquicos habían ganado las elecciones se cae por el propio peso de la historia, porque no te encuentras ni un solo periódico que aceptase que la monarquía había ganado las elecciones, no lo dice absolutamente nadie, su percepción no es esa.

¿Tan determinantes fueron las ciudades para la victoria republicana y por qué?

Las ciudades en la civilización contemporánea han sido la punta de lanza de los cambios culturales, sociales y políticos que tenemos hoy. Era lógico que la concepción de cómo es el mundo futuro llegara antes allí que al campo. Cuando los jóvenes universitarios de las ciudades españolas van a visitar el campo español, que son los que formarán las misiones pedagógicas, se dan cuenta de que es otro planeta dentro del mismo país.

"La ilusión colectiva que tuvo el país porque viniese la república es difícil de describir"

Son las ciudades las que traen la República de una manera masiva e interclasista para que haya un cambio político en España. En Madrid votó el 75% del electorado por la República, incluidos todos los distritos, incluido el barrio de Salamanca. Eso no se puede explicar ni con la lucha de clases, ni con las izquierdas. Es un voto masivo de gran parte de las élites culturales y sociales de este país. La ilusión colectiva que tuvo el país porque viniese la república es difícil de describir, para eso mejor quizás las novelas. Yo he puesto algunos datos de las 48 horas que pasan del 12 al 14 de abril: la gente estaba en la calle continuamente, eran rondas constantes de manifestantes, un júbilo colectivo constante muy difícil de describir.

Se suele preguntar si España puede ir a una tercera república, es obvio que las situaciones son diferentes. Para ello debería de cometer muchos errores el rey actual, ya los cometió el padre, pero siempre te queda el recurso de abdicar, pero es que Alfonso XIII no podía abdicar. Lo intenta después del 12 de abril, pero ya era muy tarde. Le dicen que tiene que abandonar la jefatura de Estado e irse del país.

¿Qué características tuvo la campaña electoral de los republicanos para poder calificarla como moderna?

Los republicanos recurrieron a los mítines, que era lo que se consideraba ultramoderno. Los monárquicos no, mucho menos y donde recurrían a ellos era en una proporción mucho menor. Los republicanos renuncian prácticamente al campo, en las grandes ciudades era donde se hacían los mítines, y esto es clave para las elecciones. Los usan porque es una manera muy moderna de llegar al público, porque la mayor parte de la prensa de provincias era monárquica, muy generalmente católica, quienes llevaban el peso de la campaña monárquica y hacen campaña anti republicana a conciencia. No estaban organizados como un partido de masas, salvo en País Vasco o Navarra con los carlistas populares. En el campo, cuando llegaba alguna prensa en algunas zonas rurales, alguien había que se lo leía a los demás porque la mayor parte de la gente no sabía leer. Y quienes sabían leer, normalmente eran los chavales y eran menores de 25 años que no podían votar.

¿Cuál considera que fue el papel de la prensa dentro la campaña que llevó a cabo la izquierda republicana?

"Era como hoy las redes sociales, si querías estar enterado tenías que estar al lado del que leía el periódico"

Yo no me atrevería a decir que en los años 30 es la edad de oro de la prensa, pero el que no ha leído periódicos de esos años no sabe qué es prensa escrita, es una auténtica maravilla, cuentan absolutamente todo. Cosa que saliese en el periódico a los 5 minutos corría por Madrid como riego de pólvora. Los periodistas rascaban para ver si conseguían pillar discrepancias y había veces que se lo decían a los periodistas antes de contarlo a los compañeros de gabinete. Por eso las campañas electorales se hacían mediante la prensa, y la monarquía usa básicamente la prensa para ponerse en contacto con la opinión pública. La gente lo seguía al minuto, era como hoy las redes sociales, si querías estar enterado tenías que estar al lado del que leía el periódico, que era la fuente de conocimiento.

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