Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo coincidirán este viernes en Barcelona. El responsable de esta "coincidencia no buscada", subrayan en Génova, es el Cercle d'Economia, la asociación de empresarios catalanes, que clausura su XXXVII Reunión Anual. El viaje está cargado de simbolismo para ambos en plena tormenta política por el espionaje masivo a líderes independentistas y Feijóo, consciente de la debilidad sobrevenida del presidente del Gobierno en su relación con el soberanismo catalán, está decidido a aprovecharlo. "En estos momentos será peor recibido Sánchez que Núñez Feijóo en Catalunya", presumen desde el entorno más próximo al presidente del Partido Popular.

Alberto Núñez Feijóo ha diseñado al milímetro su aterrizaje en Génova y no es casual que su primer viaje como 'jefe' del PP tenga Barcelona como destino. El todavía presidente en funciones de la Xunta de Galicia quiere ganarse a la élite económica catalana y presentará ante ellos su plan económico. Un menú de propuestas fiscales, con la bajada de impuestos como medida capital, que han recibido el beneplácito de CEPYME y de la CEOE, pero que fueron rechazadas primero por los sindicatos y, más tarde, por el Gobierno. 

El de este viernes será el primer discurso de Núñez Feijóo como presidente del PP fuera de Madrid, y será en Catalunya. Además ejercerá de telonero de Pedro Sánchez, porque el presidente del Gobierno clausurará las jornadas del Cercle d'Economía poco después. Génova tiene puestas muchas expectativas en la visita de este viernes porque Feijóo y su equipo están convencidos de que el contexto les favorece para reforzar la imagen del líder de los populares en un terreno árido para ellos electoralmente. Con tres escaños, el PP es la última fuerza política en el Parlamento de Catalunya.

Los socialistas, capitaneados por Salvador Illa, fueron los más votados aunque no lograran gobernar y el Govern quedó en manos de ERC, socio parlamentario de la coalición. Pero en las últimas semanas la legislatura se le ha complicado a Pedro Sánchez y aterrizará en Barcelona apenas 24 horas después de que la responsable del CNI reconociese que se espió, con autorización judicial, al presidente Perè Aragonés. Además, la comisión de secretos oficiales sirvió para constatar que solo 18 de las intervenciones telefónicas con Pegasus a más de 60 líderes independentistas contaban con consentimiento legal. 

"El CNI lo único que ha hecho ha sido espiar a determinados políticos catalanes con autorización judicial, previa solicitud del órgano político competente. Por tanto, necesitamos saber quién es el órgano político competente y si el momento del espionaje tenía relevancia política", aseguró este jueves Núñez Feijóo al término de la comisión.

En medio de este escenario, creen en Génova que podrán capitalizar el cabreo de los independentistas con la parte socialista del Gobierno y que en esta ocasión un líder del PP será "mejor" recibido en Catalunya que el presidente del Gobierno. 

Aún así, no hay que olvidar que el Partido Popular votó en contra de que los grupos catalanes en el Congreso entrasen en la comisión de secretos. "No podemos aceptar que los partidos que combaten la unidad de la nación participen de los secretos del Estado de esta nación", dijo Feijóo sobre ERC, Junts y la CUP. Las tres formaciones representan a la mayoría del electorado catalán.

Resucitar al PP catalán

La cúpula del PP es consciente de que la situación del partido en Catalunya es, cuánto menos, crítica. El PP de Pablo Casado y Alejandro Fernández dejó al partido en mínimos electorales. "Tenemos la obligación de mejorar nuestros resultados", reconoce el entorno de Feijóo. Aunque no será este viernes cuando la maquinaria de Génova ponga en marcha el "reinicio" autonómico del partido. "En principio", Núñez Feijóo no aprovechará el viaje a Barcelona de este viernes para reunirse con el presidente del PP catalán, Alejandro Fernández, aseguran a Público sus colaboradores. La agenda de Feijóo solo incluye la cita con los empresarios. 

Pero resucitar al PP en Catalunya es uno de los objetivos de Feijóo, que cree que su especial "sensibilidad territorial" puede acercarle a la sociedad catalana. Lo cierto es que esa sensibilidad de la que hace gala su equipo consiste únicamente en haber sido presidente de la Comunidad Autónoma gallega durante 14 años y, basado en esta experiencia, concederle más autonomía a los líderes regionales. Es la carta de presentación más usada por un político que, por ejemplo, ha limitado el uso del gallego en las escuelas. 

La nueva dirección de Génova tendrá que tomar decisiones para sacar al PP de la UCI en Catalunya-con tres diputados relegados al grupo mixto del Parlament-. Está previsto que el congreso de los populares catalanes se celebre en otoño y ahí se dirima si Fernández continúa al frente del partido, a pesar de los pésimos resultados electorales, o si Feijóo regenera la primera fila del Partido Popular catalán. 

De momento Núñez Feijóo pondrá un pie en Barcelona para defender el que ha sido su mantra en las últimas semanas: bajar impuestos.