Público
Público

Puigdemont da por hecha la amnistía y dice que "la confrontación con el Estado no ha acabado"

El expresident, sin embargo, advierte de que la unilateralidad sigue siendo la única vía para "hacer materialmente posible la independencia".

El presidente del Consell de la República, Carles Puigdemont, interviene durante la constitución de la Asamblea Territorial el 2 de marzo de 2024, en Latour-Bas-Elne (Francia).
El presidente del Consell de la República, Carles Puigdemont, interviene durante la constitución de la Asamblea Territorial el 2 de marzo de 2024, en Elne (Francia). Glòria Sánchez / EUROPA PRESS

El expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont ha vaticinado que el proceso de independencia entrará próximamente "en una nueva etapa" en la que "la lucha anti represiva no será la prioridad", en una alusión velada a la ley de amnistía, y ha apelado a mantener la confrontación con el Estado.

Puigdemont ha intervenido este sábado ante la asamblea territorial del Consell de la República, organismo parainstitucional que él mismo lidera desde Bélgica y que ha celebrado este sábado una reunión en Elna (Francia).

Con la ley de amnistía en el centro del debate político, Puigdemont ha advertido de que "la confrontación con el Estado no ha acabado", ni tampoco acabará "la represión" por más leyes que se elaboren, aunque sin mencionar explícitamente la amnistía.

"Deberemos aprender a no poner la lucha anti represiva como la prioridad y a poder destinar todos los recursos económicos, materiales al servicio de la independencia", ha indicado el expresident.

"La pulsión represora del Estado está más excitada que nunca. Lo tendremos que confrontar", ha dicho Puigdemont antes de avanzar que el proceso independentista entra "en una nueva etapa", en la que la unilateralidad tiene que ser "práctica" para "hacer materialmente posible la independencia".

El Consell de la República es una de las estructuras paralelas a la Generalitat autonómica ideadas por el independentismo en 2018, aunque en la práctica ha funcionado como espacio de representación simbólica y sin competencias efectivas, presidido por Puigdemont y visto con enormes recelos por ERC, que temía que JxCat lo utilizara como contrapoder al presidente catalán, Pere Aragonès.

Se trata de una nueva etapa que el Consell de la República "tiene la obligación" de liderar: "Todo lo que hemos hecho hasta ahora, ahora toma todo el sentido del mundo", ha dicho el expresident.

En esta nueva etapa, ha dicho Puigdemont, será posible "dejar atrás el exilio" y desprenderse "de la losa de la represión que pesa sobre la cabeza de miles de familias". 

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias