Una caída de tensión en todos los trenes de la alta velocidad ha provocado el caos en la estación de Chamartín (Madrid), con aglomeraciones de más de 500 personas e importantes retrasos en los viajes programados. Desde Adif han informado que los "técnicos trabajan en solucionar la incidencia a la mayor brevedad posible".

El origen de la incidencia ha tenido lugar sobre las 18.00 horas y se debe a un tren sin pasajeros que circulaba para estacionarse en la vía y ha enganchado su pantógrafo en la catenaria. Los afectados sufren "un calor insoportable, a pesar de estar el aire acondicionando en funcionamiento, debido a la masiva aglomeración", informa María José Pintor desde la estación de Chamartín.

Desde Adif, han indicado que la situación ya se está normalizando y que, aunque con previsibles retrasos en algunos casos, todos los trenes anunciados llegarán a su destino. "Apenas salen trenes, no dejan acceder a la zona de control salvo a los viajeros de aquellos pocos trenes, los cuales salen con retrasos importantes", indica Pintor.

"Los viajeros esperan impacientes, con nerviosismo y mucho calor noticias que llegan por un altavoz manual", añade. Por su parte, el administrador de infraestructuras ferroviarias ha indicado que la circulación para los trenes con origen o destino en el norte y el levante "comienza a normalizarse".

"La indignación crece entre los viajeros, que se quejan del calor y de la falta de información. Mientras, el trato del personal de seguridad y de la Policía dista mucho de ser amable", describe Pintor in situ.

Esta situación se produce después de que el pasado lunes unos 47 trenes con origen o destino en la citada estación se vieran afectados por diversas incidencias que provocaron grandes demoras en la circulación ferroviaria.

"La estación de Chamartín, ya muy mermada por las obras desde hace más de un año, ha quedado pequeña para acoger a tanta gente mientras el personal de seguridad y la Policía Nacional tratan de que se organicen filas de pasajeros", analiza la periodista.

De forma progresiva se está alimentando la energía en las catenarias de cinco vías, había comunicado Adif. Sin embargo, desde la megafonía de la estación han anunciado una "avería extrema", según relata Pintor. "La sala de atención a viajeros con discapacidad, con poco más de diez asientos, apenas ha podido dar un respiro a las personas mayores o de movilidad reducida ", destaca.

"En el otro lado de la estación, la de acceso de la calle, sigue el tumulto de gente porque van llegando nuevos pasajeros que tenían prevista horarios de salida a partir de las 21.00 horas", añade Pintor.