La Comunidad de Madrid ha levantado la suspensión temporal sobre la actividad del laboratorio de Vivotecnia, que podrá volver a investigar con animales. El centro tenía paralizada sus labores científicas desde el 11 de abril, cuando la ONG Cruelty Free International sacó a la luz unas imágenes en las que se constataban escenas de violencia indiscriminada y maltrato hacia perros, monos, conejos y otros seres vivos.

La actividad del laboratorio se habría reanudado el pasado 1 de junio, según han confirmado a Público fuentes de la Consejería de Medio Ambiente. La decisión se ha tomado después de que Vivotecnia haya implementado algunas medidas correctoras exigidas desde la Comunidad de Madrid como la instalación de cámaras de videovigilancia y la supervisión in situ de una veterinaria que informará diariamente del estado de los animales del laboratorio.

Desde la Consejería de Medio Ambiente explican que las actuaciones que se han realizado en el laboratorio han sido coordinadas con el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA). La vuelta de la actividad a Vivotecnia, no obstante, no cambia la intención de la Comunidad de Madrid de "seguir adelante con la sanción administrativa al laboratorio".  Además, el Gobierno madrileño recuerda que hay también un proceso judicial abierto contra el laboratorio.

En un comunicado conjunto, PACMA, FAADA, Anima Naturalis y SOS 112 Vagabundos –las organizaciones querelladas contra Vivotecnia por delitos de maltrato animal– han acusado a la Comunidad de Madrid de "mentir deliberadamente" y lamentan que en todos estos meses no se haya procedido a decomisar a los animales pese a las evidencias de violencia que había en el vídeo de Cruelty Free International. 

Las organizaciones animalistas señalan directamente al comunicado que la Comunidad de Madrid emitió en abril, en el que se dejaba la puerta abierta al decomiso de los animales. Dos meses después, según denuncian, el Gobierno autonómico no sólo no ha liberado a los animales para ponerlos bajo la tutela de organizaciones y protectoras, sino que ha procedido a levantar la suspensión de la actividad investigadora. El decomiso de los animales también fue solicitado por las organizaciones animalistas ante el Juzgado de Colmenar Viejo, pero el magistrado desestimo la petición.

"Seguiremos luchando en los juzgados para liberar a los animales", dicen los animalistas. "Exigimos al Gobierno que invierta en validar e investigar métodos alternativos para acabar con la cruel experimentación en animales. No tiene cabida en la sociedad actual, empática y que vela por el bienestar animal".

El caso de Vivotecnia puso luz sobre un sector opaco como la experimentación científica y llevó a cientos de animalistas a concentrarse frente a las puertas del laboratorio durante semanas para reclamar la liberación de los animales. La investigación de Cruelty Free International sirvió para abrir un debate público sobre la necesidad de buscar alternativas científicas para no utilizar seres vivos en laboratorios.