España ha acogido en estos días a un total de 566 afganos, la mitad de los cuales ha pedido protección internacional a España. El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha detallado que de el medio millar de ciudadanos afganos, 91 se encuentran fuera del campamento aéreo de Torrejón de Ardoz (Madrid) y se han alojado en diferentes centros de acogida repartidos por el territorio, según Europa Press.

A la espera de que llegue en la jornada de hoy otro avión a España con 260 personas evacuadas, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha indicado que el tiempo que se mantendrá el operativo "no depende de nosotros porque el aeropuerto de Kabul en este momento lo controla el Ejército norteamericano". Sin embargo, Robles ha apuntado que el operativo español seguirá trabajando mientras pueda "para poder traer al mayor número de personas; haremos lo que podamos durante el tiempo que podamos".

El titular de Migraciones ha insistido en que la situación en Afganistán es "dramática, muy convulsa y cambiante en el tiempo", aunque ha asegurado que se está intensificando la llegada de aviones. También la ministra de Defensa ha aseverado  que la situación es "caótica" y, por tanto, cambia de forma "tan rápida que a lo mejor lo que vale para ahora no vale para la hora siguiente".

El ministro Escrivá ha resaltado la vulnerabilidad de las personas que quieren salir de Afganistán entre ellas mujeres gestantes, de las cuales una ya ha llegado a España una embarazada de ocho meses y hay otras dos cuya situación es preocupante y para las que se ha enviado médicos especializados. "Hay personas muy vulnerables, han llegado 200 niños hasta ahora", ha señalado.

Por otra parte, Escrivá ha explicado el proceso que siguen los afganos tras llegar al aeropuerto: Primero, se les lleva a un hangar donde se les hace un test covid, ahí es donde los evacuados piden protección a España; después, tras pasar entre 48 y 72 horas en el campamento, aquellos que pidan refugio en España pasan a la red estatal de acogida para solicitantes de protección internacional, con centros gestionados por el Estado y otros por oenegés, con una estancia de entre 6 a 9 meses en los que se les enseña español y a relacionarse con las administraciones; finalmente, pasan a pisos donde viven solos y en caso de no tener trabajo, sufraga el Estado los gastos durante 18-24 meses, apunta EFE.