El cine español tuvo este domingo una importante presencia en los Premios Platino iberoamericanos que premiaron como mejor actor a Antonio de la Torre (El Reino), quien homenajeó al fallecido Alfredo Pérez Rubalcaba. Durante la gala, el actor malagueño tuvo una mención especial para el fallecido político socialista, quien recibió el guión de El reino y lo reenvió al equipo con "hasta 50 correcciones".

"Es la tercera vez que vengo a México, espero que haya más y que sea a trabajar", dijo De la Torre al recoger la estatuilla en la VI edición de los Premios Platino del cine iberoamericano, celebrada en la Riviera Maya, en el Caribe mexicano, por segundo año consecutivo.

El reino, inspirada en las tramas de corrupción española Gürtel y el caso Bárcenas del Partido Popular, fue una de las películas más premiadas en la última edición de los premios Goya, en la que se hizo, entre otros galardones, con los de mejor director (Rodrigo Sorogoyen) y mejor actor protagonista. El personaje principal de la película es un político corrupto en una comunidad autónoma española y el argumento se basa en cómo este se desmarca de su partido para ayudar a un amigo que también se ve involucrado en corrupción.

Un tanto para la industria española

La industria española también se marcó un tanto con el premio a mejor serie televisiva para Arde Madrid, dirigida por Paco León y Anna R. Costa, que narra la vida de la actriz Ava Gardner durante su residencia en Madrid en los años 60. "Este proyecto ha sido duro e intenso pero también gratificante. Gracias a Movistar+, esto demuestra que hay vida después de Netflix", dijo un sorprendido Paco León, codirector de la serie.

Aunque Campeones, de Javier Fesser, perdió el premio a mejor película ante la mexicana "Roma", sí pudo llevarse el Premio Platino a la Educación en Valores por el trato que hace de las discapacidades intelectuales. Fesser dijo al recoger la estatuilla que se sintió feliz por haber hecho una película como esta y "darle la oportunidad a unos de meterse en la piel de personas extraordinarias".

El mejor documental fue para la española El silencio de los otros, sobre la lucha por la justicia de las víctimas del franquismo. El galardón a mejor película de animación cayó en manos de la también española Un día más con vida, dirigida por Raúl de la Fuente, mientras que la mejor música original y dirección montaje para las españolas Yuli y El reino.

Pero la gran triunfadora de la noche fue la película Roma, del mexicano Alfonso Cuarón, que se llevó cinco Premios Platino, incluidos el de mejor película y mejor director. Todo hacía presagiar que esta sería otra noche dulce para la película mexicana, pues partía como gran favorita con nueve nominaciones y no defraudó al llevarse cinco estatuillas.

Además de ser considerada la mejor película iberoamericana del año y de reconocer la labor de Cuarón como mejor director, el filme se llevó también los Platino a mejor guión, mejor dirección de fotografía y mejor dirección de sonido. Roma, una película autobiográfica de Cuarón, retrata la vida de una familia de clase media del México de la década de 1970 y la relación que tiene con su empleada del hogar, Cleo, una mujer indígena interpretada por la aclamada Yalitza Aparicio.

La obra de Cuarón ganó este año los Óscar a mejor película extranjera, mejor fotografía y mejor dirección, consolidando el éxito de los directores mexicanos en los premios estadounidenses. Sin embargo, ni Yalitza Aparicio ni Marina de Tavira, ambas nominadas a mejor actriz por Roma, se llevaron la estatuilla, que fue a parar a manos de Ana Brun por su participación en Las herederas.

Al recoger la estatuilla, la paraguaya -prácticamente retirada y con una trayectoria centrada en el teatro- dedicó el galardón a los actores y productores de su país que trabajan "con pocos recursos pero con mucho talento". México se llevó también las estatuillas a mejores interpretaciones de teleserie, que fueron para Diego Luna, de Narcos: México, y Cecilia Suárez, de La casa de las flores, quien dio la coincidencia de que también era la presentadora de la gala, junto al español Santiago Segura.

Uno de los momentos más emotivos de la noche fue cuando el actor mexicano Tenoch Huerta emocionó a Yalitza Aparicio al ofrecerle una dalia como muestra de su admiración. Acto seguido, ambos actores pidieron que los asistentes se diesen la mano en alto como símbolo de compañerismo entre los hombres y las mujeres involucradas en el mundo del cine.

Pero el tono habitual de la gala fue el humor, con chistes encorsetados de Santiago Segura para un evento que se mantuvo más alejado de las reivindicaciones políticas que hubo en años anteriores. Solo el incombustible Raphael, ganador del Premio Platino de Honor por su larga trayectoria, logró poner en pie al público con su mítico Yo soy aquel para convertir el evento en su "gran noche".