Renfe ha lanzado una nueva oferta de empleo público para incorporar a 57 nuevos profesionales de treinta distintos perfiles técnicos, según informó la compañía ferroviaria a través de su web. 

Entre los perfiles que demanda la compañía figuran varios relacionados con las nuevas tecnologías, como son técnicos de ciberseguridad y técnicos de infraestructuras de seguridad informática.

Hasta ahí todo normal. Lo que ya no es tan normal, es lo que denuncia la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU): según esta organización, Renfe exige un ingreso de 10 euros para poder participar en el proceso de selección y completar el registro de solicitud. La OCU asegura que Renfe tiene establecido este ingreso en la entidad financiera colaboradora, conforme establece en las bases de la convocatoria. 

En su comunicado, la OCU afirma que Renfe "justifica que este pago se realiza en concepto de derechos de participación. Una tasa que cualquier candidato deberá abonar solo por participar en el proceso de selección y que en ningún caso le será devuelta en caso de no ser elegido".

La OCU considera "lamentable" esta práctica sobre todo de una empresa pública como Renfe, sobre todo porque "los afectados son además en su mayor parte desempleados, que tienen más dificultad para afrontar cualquier tipo de gasto". La organización añade que "estos procesos de selección, especialmente si proceden de una entidad pública, deben estar abiertos a la participación de cualquier candidato, y que sus costes deben sufragarse con los impuestos que ya pagan los ciudadanos".  

La OCU pide a Renfe que cese en este tipo de prácticas y que devuelva a los candidatos ya inscritos en este proceso la cantidad abonada por este concepto.

Pese a esta crítica de la OCU, no es inhabitual en el sector público, el pago de una cantidad por inscribirse en una oposición (o la necesidad de cursos previos de preparación para el exámen).