Sigue en directo el juicio a Rubiales por el beso no consentido a Jenni Hermoso

Este lunes ha comenzado en la Audiencia Nacional el juicio contra Luis Rubiales, expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), quien enfrenta cargos por agresión sexual y coacciones hacia la futbolista Jenni Hermoso. Los hechos se remontan al 20 de agosto de 2023, cuando, tras la victoria de la selección española en el Mundial femenino celebrado en Australia, Rubiales besó en los labios a Hermoso sin su consentimiento, según ha destacado la Fiscalía en su acusación.

Rubiales, que podría enfrentar una condena de dos años y medio de prisión, llegó a la sede judicial en San Fernando de Henares con más de 45 minutos de antelación, acompañado de su abogada, Olga Tubau. Poco después, Jenni Hermoso, quien actualmente milita en el CF Pachuca de México, llegó al lugar. La jugadora, que declara como testigo en el juicio, coincidió brevemente con Rubiales en el vestíbulo antes de ser conducida a una sala para esperar su turno.

El proceso judicial también involucra a otras tres figuras vinculadas a la RFEF: Albert Luque, ex director deportivo de la selección masculina; Jorge Vilda, ex entrenador de la selección femenina; y Rubén Rivera, antiguo responsable de Marketing de la federación. Todos ellos están acusados de coaccionar a Hermoso y a su familia para que justificaran el beso como un acto consentido. Vilda, al llegar al tribunal, declaró a los medios que defenderá su inocencia y afirmó que "será el juez quien decida" sobre los hechos.

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El caso ha generado una gran expectación mediática, con cerca de un centenar de profesionales de unos 70 medios de comunicación y productoras acreditados para cubrir el juicio. De ellos, 15 medios son internacionales. La Fiscalía ha subrayado que el beso fue "sorpresivo y sin consentimiento", y ha denunciado la "situación de hostigamiento" a la que fue sometida Hermoso para que avalara el acto. Además, se acusa a los otros tres implicados de haber utilizado su posición de influencia dentro de la RFEF para presionar a la jugadora y a su entorno.