El PSOE cae en el CIS de abril. Desde diciembre de 2019, cuando se publicó el primer barómetro tras las elecciones del 10-N, los de Pedro Sánchez habían mejorado sus expectativas electorales en cada estudio, mes a mes; pero la tendencia al alza parece haberse frenado con el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas, publicado este miércoles.

El estudio da al PSOE una estimación de voto del 31,2%, un 0,7% menos que en el anterior barómetro, de marzo, donde los socialistas tenían una estimación de voto del 31,9%. Los resultados de los de Sánchez en la encuesta de marzo mejoraban a los de febrero, cuando obtuvieron un 30,9% en estimación de voto.

A su vez, el estudio de febrero pronosticaba un mejor resultado para el PSOE que el de enero, que entonces le daba a los socialistas un 30,4%. El primer barómetro de esta legislatura se realizó en diciembre de 2019, un mes después de las elecciones; la encuesta daba a los de Pedro Sánchez un 28,3% en estimación de voto, tres décimas más que los resultados que obtuvieron en los comicios.

El barómetro publicado por el CIS este miércoles se basa en un trabajo de campo realizado entre el 30 de marzo y el 7 de abril. En este momento, España llevaba ya más de 15 días del confinamiento decretado por el estado de alarma y las cifras de contagios y de fallecidos por la covid-19 eran bastante altas. De hecho, el día 2 de abril, cuando se estaba realizando el trabajo de campo del estudio, fue la jornada con más fallecimientos (950) desde el inicio de la emergencia.

El barómetro no solo pronostica una caída de las expectativas para el PSOE dentro del Gobierno, sino que Unidas Podemos también empeora su resultado respecto al barómetro de marzo y cae casi un punto, desde el 12,9% al 12%. Los de Pablo Iglesias ya habían caído en el estudio de marzo, ya que en febrero llegaron a tener un 13,6% en estimación de voto (en las elecciones del noviembre obtuvieron un 12,8% de los votos).

Si Sánchez muestra un frenazo en el crecimiento de sus expectativas electorales, el PP parece empezar a consolidar su tendencia al alza. Los de Pablo Casado pasan de una estimación de voto del 19,6% en el barómetro de marzo a una del 21,1% en el último estudio. En febrero el partido conservador tenía un 18,9%.

Vox, en cambio, experimenta la mayor caída de las cuatro principales fuerzas políticas a la hora de comparar las dos últimas encuestas del CIS. Los de Santiago Abascal obtuvieron un 14,8% en el barómetro de marzo, y en el de abril caen casi dos puntos, hasta el 13%. En febrero Unidas llegó a desbancar a la formación de ultraderecha como tercer fuerza en estimación de voto; ahora, pese a su caída, Vox mantiene esta posición.