La diputada de Podemos Alejandra Durán ya no es la representante de la coalición Por Andalucía en la Mesa del Parlamento andaluz. Ahora lo es Esperanza Gómez, diputada de Más País. La mesa, según fuentes parlamentarias, aceptó el escrito presentado por la portavoz Inma Nieto (IU) en el que se pedía el relevo y no tomó en consideración el presentado por el portavoz adjunto, Juan Antonio Delgado (Podemos).

En Por Andalucía conviven tres partidos –IU, que tiene una diputada, la portavoz; Más País, una diputada, y Podemos, tres diputados– que tienen representantes en el Parlamento y otros tres, Equo, Alianza Verde e Iniciativa del Pueblo Andaluz, que no los tienen.

El episodio de la mesa revela la profunda desconfianza que existe hoy entre los socios y pone en riesgo una alianza que ya nació con mal pie. Podemos, legalmente, está fuera de la coalición y sus parlamentarios fueron en las listas como independientes.

En una rueda de prensa en el Parlamento, Nieto manifestó que se había producido una "quiebra de la confianza" en el grupo y las achacó a "cuestiones ajenas" a esta Comunidad Autónoma, en una referencia que se puede interpretar como las cuitas en el espacio que pretende crear Yolanda Díaz y Podemos.

De fondo, además del control del grupo, ahora en manos de IU, que tiene la portavoz, y de Más País, que tiene el representante en la Mesa, aparece una pelea por el reparto del dinero, unos 700.000 euros al año que va a recibir el grupo. El acuerdo entre IU y Podemos in extremis la noche electoral se repartía este dinero entre ambas formaciones.

Papel mojado

Los acuerdos que permitieron hacer una campaña conjunta aparecen ahora prácticamente como papel mojado. IU y Más País reivindican que el espacio del debate para la toma de decisiones está en la mesa de partidos, donde están todos. Mientras que Podemos considera que el grupo, donde tiene mayoría, debe tener cierta autonomía.

La rueda de prensa de Nieto, en la que esta dibujó un panorama en el que evitó la palabra ruptura, y dijo que "restituir la confianza es perfectamente posible", estuvo también trufada de cargas de profundidad hacia Podemos. Así, Nieto dijo, por ejemplo: "Nadie entendería que un espacio consensuado, debatido y con reglas del juego adoptadas por unanimidad violentase la norma que se ha dado para que sólo una minoría de personas tomase decisiones".