"No di órdenes políticas a los Mossos sobre el referéndum". Así de contundente se ha mostrado el exconseller de Interior Joaquim Forn, que ha sido el segundo procesado en comparecer ante el tribunal que juzga el procés. El también candidato a la Alcaldía de Barcelona, a diferencia de Oriol Junqueras, ha aceptado responder a las preguntas de la Fiscalía y la Abogacía del Estado, así como a su propia defensa.

Forn, en prisión provisional desde el 2 de noviembre de 2017, ha repetido en varias ocasiones que, por compromiso político, apoya el referéndum. Sin embargo, a tenor de sus palabras, esto no es compatible con las acciones llevadas a cabo desde el departamento que dirigía. En este sentido, ha aclarado que desde su Consellería no se llevó a cabo "ninguna acción a favor del referéndum" y que "ordenó a los Mossos cumplir con los mandamientos judiciales". "Ninguno de los actos de los Mossos fue contrario a la Constitución, ni el 20-S ni el 1-O", ha reiterado más tarde.

El exconseller ha defendido la base legal para organizar la consulta sobre la independencia de Catalunya, "no es ningún tipo de delito". Asimismo, ha reconocido que tanto él como el resto de miembros del Govern eran conscientes de los requerimientos del Tribunal Constitucional para organizar el referéndum.

Sobre el documento Enfo CATs, conocido como "la hoja de ruta del procés", Forn ha apuntado que lo desconocía. "Lo conocí en la prisión de Estremera, todo lo que conozco es por los medios de comunicación". 

Rifirrafes entre el fiscal y Forn

Fidel Cadena se ha detenido durante unos minutos en los hechos ocurridos los días 20 y 21 de septiembre de 2017. La concentración de miles de catalanes frente a la sede del Departamento de Economía de la Generalitat, para protestar por los registros de la Benemérita de cara a la organización del 1-O, es una de las bases sobre las que se fundamenta el delito de sedición que se le imputa al exlíder de la ANC, Jordi Sànchez, y al presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart.

El exconseller de Interior Joaquim Forn, en el juicio al 'procés'. EFE/Tribunal Supremo

En el marco de de esta manifestación, varios han sido los rifirrafes que han protagonizado el fiscal y Joaquim Forn. Primero, Forn ha acusado a la Fiscalía de elaborar "relatos peliculeros" en su escrito de acusación sobre los hechos que se juzgan en el Tribunal Supremo. Después, a cuenta de los coches de la Guardia Civil "devastados" –término empleado por el representante del Ministerio Público– el 20 de septiembre de 2017, en los aledaños de la Conselleria d'Economia. "Lo he visto y lo condené" y ha corregido a Cadena: "Me parece que eran dos los coches devastados [no siete, como había apuntado anteriormente el fiscal]". Cadena ha agregado que no había empleado el término "devastado", sino "destrozado", a pesar de que sí lo había utilizado.

Vocabulario aparte, el escrito de acusación de la Fiscalía no determina el número exacto de coches devastados o destrozados. Los manifestantes que se concentraron ante la institución catalana el 20-S "pincharon diversos coches patrulla de la Guardia Civil", señala el texto.

Traducción errónea al castellano

Por su parte, la defensa de Forn también ha discutido con el representante del Ministerio Público por la traducción errónea al castellano de un documento en catalán. La expresión de Forn "el referéndum s'ha de celebrar" ha sido traducida por la Fiscalía como "el referéndum se debe celebrar". Así, el letrado del exconseller ha aclarado que "no hay ningún contenido de naturaleza imperativa", ya que Forn aludía a una mera previsión: "Tiene previsto celebrarse".

En cuanto a las cargas policiales del 1-O, el dirigente asociado a PDeCAT ha denunciado la violencia empleada por la Policía Nacional y la Guardia Civil: "Hubo violencia en determinados puntos por actuaciones erróneas" de ambos cuerpos del Estado. Y ha sacado a la palestra la orden de actuación emitida por la Secretaría de Estado, bajo las órdenes de Diego Pérez de los Cobos, para mantener "la seguridad sobre la eficacia". 

En este contexto, ha vuelto a defender la actuación de los Mossos el día de la consulta: "No hubo solicitud para que se modificaran las órdenes de actuación". Además, se ha jactado de haber cumplido "a rajatabla" todas las instrucciones y de participar "en todas las reuniones de coordinación".

No hubo malversación

Forn, que se enfrenta a una pena de 16 años de prisión e inhabilitación por los delitos de rebelión y malversación, según la petición de la Fiscalía, ha rechazado el uso de dinero público para financiar el referéndum. "La información que yo tengo es que no se produce ningún gasto relacionado con el referéndum", ha matizado. 

Ante las preguntas de la abogada del Estado, Rosa María Seoane, el exdirigente ha reiterado que él no dio nunca ninguna orden política a los mandos de los Mossos d'Esquadra. "Jamás utilicé los mecanismos de la Consellería de Interior para impulsar el referéndum. Lo que hago es decirle a los Mossos: 'Ustedes, lo que han de hacer es cumplir con sus funciones de policía judicial'", ha afirmado.

Asimismo, tras ser cuestionado por la Declaración Unilateral de Independencia, Forn ha negado los efectos jurídicos de esta votación. En esta línea, ha relatado que se leyeron dos propuestas: una de rechazo a la aplicación del artículo 155 por parte del Gobierno español y otra por la que se abría un proceso constituyente. Fuera de la sesión parlamentaria se hicieron "discursos políticos", nada que ver con la constitución de un nuevo Estado, como le ha sugerido su abogado.