Las ejecutivas de las patronales y los sindicatos han aprobado un preacuerdo que despeja el camino a la nueva reforma laboral que el diálogo social lleva trabajando desde hace meses. De esta manera, a falta de detalles técnicos, los agentes sociales dan el visto bueno al nuevo texto que modifica sustancialmente el Estatuto de los Trabajadores en cuestiones como los límites a la temporalidad, la negociación colectiva o la subcontratación, entre otras reformas.

El miércoles por la noche, tras más de siete horas de reunión, Gobierno y agentes sociales dieron por concluidos sus trabajos en esa jornada sin acuerdo. Se anunció que tanto los representantes de los trabajadores como el empresariado iban a convocar este jueves a sus cúpulas, aunque desde CCOO y desde UGT se insistió en que no había preacuerdo y que estas reuniones iban a servir para fijar posiciones y para "informar" a las ejecutivas.

Sin embargo, este jueves todo ha dado un giro de 180 grados. Por la mañana, la CEOE anunció que aprobaba un "preacuerdo" sobre la reforma laboral, pillando por sorpresa a las ejecutivas de los sindicatos, que se encontraban reunidas en ese momento. Primero UGT y después CCOO avanzaron que también se sumaban a ese preacuerdo, que no existía el jueves por la noche, según fuentes de la mesa de diálogo.

La reforma aborda muchos de los problemas fundamentales del mercado de trabajo español, singularmente la temporalidad, con la simplificación de los
contratos retomando la causalidad, incrementando las sanciones a su uso
irregular y fomentando la estabilidad en el empleo.

Se impulsa la contratación formativa, inspirándose en el modelo dual
alemán y garantizando su coordinación con el sistema de Formación
Profesional y con los estudios universitarios. También se recupera la ultraactividad indefinida (los derechos y obligaciones de los convenios expirados se mantienen hasta que se apruebe un nuevo convenio) y se acaba con la prioridad de convenio de empresa en material salarial (los salarios de los convenios de empresa en ningún caso pueden estar por debajo de los fijados en los sectoriales).

Yolanda Díaz: "Es un día histórico para los trabajadores"

La norma contempla un sistema de ERTE de estructural (denominado mecanismo RED) para afrontar crisis cíclicas o sectoriales con flexibilidad interna negociada, formación y recualificación de los trabajadores, con el objetivo de evitar despidos en malos momentos económicos.

La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha calificado esta jornada como un "día histórico" para los trabajadores: "Es un día muy especial para el Ministerio de Trabajo y para el Gobierno de España, es un día histórico para los trabajadores y trabajadoras de nuestro país", ha afirmado, y ha defendido que con esta reforma no solo se "recuperan" derechos, sino que se "ganan". "España es hoy mucho mejor con esta norma", ha concluido Díaz, que ha confirmado, como avanzó Público, que el texto se aprobará en Consejo de Ministros el 28 de diciembre.

"Hemos alcanzado el acuerdo que veníamos persiguiendo desde hace 10 años", ha asegurado el secretario general de CCOO, Unai Sordo. "Por primera vez en décadas una reforma laboral de calado no se hace para recortar, precarizar el empleo, abaratar el despido y debilitar el poder organizado de los trabajadores, sino que reme en la dirección contraria", ha defendido el líder sindical.

Para UGT, este acuerdo es el primero en democracia en "sumar derechos" y consigue objetivos fundamentales para los trabajadores. En concreto, para UGT hay tres avances sustanciales: la recuperación de la negociación colectiva, la lucha contra la temporalidad y avanzar en la estabilidad en el empleo.

UGT en la noche del miércoles mantenía que no había ni preacuerdo, pero una vez recibido la propuesta completa de la mesa de Diálogo, el sindicato socialista entiende que se han cumplido sus pretensiones.