Este artículo se publicó hace 2 años.
El PP aumenta sus exigencias y presiona ahora al Gobierno para que retire la reforma de la ley del Poder Judicial
Ponen como línea roja que el Ejecutivo retire la reforma de la ley orgánica del Poder Judicial antes del jueves para renovar el Consejo. LLevan más de tres meses alargando las negociacioens.
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La estrategia de Pablo Casado sigue en Génova. "Nosotros estamos dispuestos a negociar la renovación del CGPJ con respecto a la ley en vigor", asegura Esteban González Pons, pero "el Gobierno debe retirar antes del jueves la reforma" de la ley orgánica del Poder Judicial. El PP de Feijóo presiona así al Ejecutivo, después de tres meses alargando las negociaciones, y pide sentarse a pactar una reforma más amplia como condición para renovar el órgano de gobierno de los jueces. La portavoz de la coalición, Isabel Rodríguez, ya le ha contestado: "Antes de empezar a hablar, lo que hay que hacer es cumplir". Es decir, primero renovar el CGPJ y luego lo demás.
Un día antes de que comience el debate sobre el estado de la nación y a dos de que se cumpla el plazo de un mes que se dio el PP, Pons ha anunciado su propuesta para renovar el Consejo General del Poder Judicial. Un documento titulado 'Pacto para reforzar la independencia judicial y la calidad democrática'. Bajo el mensaje de que "no basta con renovar las instituciones, tenemos que hacer un esfuerzo como en la Transición para regenerarlas y reformarlas", Génova aumenta sus exigencias para cumplir con el mandado constitucional de renovar el CGPJ y el TC.
Feijóo pone una línea roja, la reforma de la ley orgánica del Poder Judicial que el Gobierno prevé aprobar este jueves en el Congreso en la que corrige una norma aprobada por el propio Ejecutivo el año pasado para que el CGPJ en funciones pueda hacer nombramientos en el Constitucional, y muchas condiciones.
La hoja de ruta del PP
De modo que el plan del PP sería el siguiente: que el Gobierno retire la ley antes de las próximas 48 horas, solo entonces estarían dispuestos a sentarse a negociar los nuevos nombramientos del CGPJ, para luego pactar una reforma amplia de la justicia.
El documento que el PP le ha enviado al Gobierno este lunes por la mañana incluye las siguientes medidas: que nadie pueda ser nombrado Fiscal General del Estado si ha estado en política en los cinco últimos y que pueda ser recusado por esta causa; que la negociación de los vocales del CGPJ se lleve a cabo en el Congreso y Senado por sus grupos parlamentarios; que el nombre del presidente del CGPJ será decidido por los vocales del Consejo; y que en el plazo de seis meses el nuevo CGPJ proponga al Congreso un nuevo modelo de elección para el futuro.
En el PP creen que "no hay ninguna propuesta" que el Gobierno no pueda aceptar y confían en que el Ejecutivo ceda y retire a la reforma de ley orgánica antes del jueves. Pero la portavoz Isabel Rodríguez ha alejado esa posibilidad y la renovación del CGPJ se cronifica día a día y exigencia a exigencia.
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