Público
Público

Este árbol puede ayudar a frenar el cambio climático

Un tipo de álamo temblón euroasiático podría ser un dique de contención del cambio climático, según un equipo internacional de científicos.

Ejemplo de un álamo temblón euroasiático en un bosque de República Checa.
Ejemplo de un álamo temblón euroasiático en un bosque de República Checa. Antonin Kusbach / Universidad de Mendel

Existe un tipo de bosque en el centro de Europa al que nunca se le ha prestado demasiada atención, pero que podría ser un dique de contención frente al cambio climático. Estas zonas muestran una enorme capacidad de recuperación y aumentan la diversidad de especies. Así lo ha confirmado un equipo internacional de científicos forestales.

En concreto, el álamo temblón (Populus tremula), un árbol típico del entorno euroasiático, genera hábitats capaces de hacer frente al calentamiento global, según indica la investigación que publica este miércoles la revista científica PLOS ONE.

Varios álamos temblón en uno de los bosques del estudio.
Varios álamos temblón en uno de los bosques del estudio. Antonin Kusbach / Universidad de Mendel

"Este árbol es lo que se conoce como 'especie pionera'. Es decir, funciona como un foco de biodiversidad porque atrae a especies de flora y fauna y mantiene un medio ambiente sano", explica a Público Antonin Kusbach, investigador ambiental en la Universidad de Mendel (República Checa) y autor del estudio.

Un dique de contención contra la crisis climática

Son varias las razones por las que el álamo promueve la biodiversidad en sus alrededores. "Por un lado, crece en lugares relativamente húmedos. Estos suelos son ricos, por lo que se trata de lugares con alta productividad y vegetación frondosa", detalla Kusbach a este medio.

Todas estas condiciones "atraen a microbios del suelo, insectos y plantas como líquenes y musgos, así como especies de fauna", añade el investigador. Además, subraya que algunas de estas especies dependen de manera particular del entorno que desarrolla el álamo temblón.

El equipo de investigación realiza trabajo de campo en uno de los bosques analizados.
El equipo de investigación realiza trabajo de campo en uno de los bosques analizados. P.C. Rogers / Universidad de Utah

"Los ecosistemas de álamo temblón se regeneran y colonizan nuevas zonas con rapidez", señala el autor del estudio. "Este tipo de bosques se adaptan muy bien al aumento de incendios, enfermedades, plagas de insectos y vendavales", escenarios previstos a causa de la crisis climática.

El científico advierte a este diario que "no puedes hacer frente al cambio climático con monocultivos vulnerables", es decir, aquellas plantaciones dedicadas al cuidado de una única especie. Kusbach defiende que los ingenieros forestales deben trabajar "en el retorno de algunas especies pioneras, como el álamo temblón o el abedul, a los monocultivos centroeuropeos para aumentar su escasa biodiversidad".

Útil para la reparación de todos los entornos europeos

El experto destaca a este medio que esta técnica también es útil para el paisaje mediterráneo. "Puede ser beneficioso si los gestores del terreno siguen las exigencias ecológicas del lugar. De este modo, pueden devolver restablecer las especies naturales que los escenarios del cambio climático pongan en peligro", afirma a Público.

En concreto, Kusbach menciona la denominada 'migración asistida'. Esta técnica consiste en la plantación intencionada de especies dentro o fuera de su geografía habitual para compensar los riesgos de la crisis climática en la supervivencia de la biodiversidad.

La Unión Europea busca reparar el 20% de su terreno deteriorado para 2030

La migración asistida es objeto de debate entre los especialistas. A pesar de sus múltiples ventajas, también conlleva riesgos sobre el impacto irreversible en los ecosistemas locales. De todos modos, el autor del estudio recomienda utilizar especies pioneras de proximidad para "desempeñar un papel fundamental en el retorno de la vegetación a los lugares donde solía estar".

El Parlamento Europeo aprobó en febrero la nueva ley de Restauración de la Naturaleza. Aunque su tramitación se encuentra bloqueada desde el lunes por la oposición de ocho países, el objetivo es reparar al menos el 20% de sus zonas terrestres y marinas para 2030 y todos los ecosistemas que lo necesiten para 2050.

De acuerdo con Kusbach, técnicas como la recuperación del álamo en los paisajes europeos pueden ser de gran utilidad para cumplir los propósitos de la Unión Europea. No obstante, matiza a este medio que "necesitamos ver el contexto de un bosque como un ecosistema, no solo considerar este árbol como un salvador de la situación".

Millones de hectáreas estudiadas

El equipo estudió más de cuatro millones de localizaciones para comprender mejor el hábitat histórico y potencial del álamo temblón en todo el terreno forestal de República Checa, que tiene una composición similar a la de los bosques de toda Europa central.

En el pasado, los bosques de álamo temblón estaban mucho más extendidos por estas regiones, pero la gestión comercial de estos entornos ha alterado sus hábitats. Sin embargo, los científicos sostienen que no tiene por qué seguir siendo así.

La propagación del álamo temblón en los bosques europeos podría ser más sencillo de lo que parece

"Una corrección del rumbo en la gestión forestal europea podría ayudar a reparar estos asombrosos parajes", afirma el coautor Paul Rogers, investigador en el Centro de Ecología de la Universidad Estatal de Utah. "En cada área a la que regrese el álamo temblón, florecerá la diversidad vegetal y animal".

Restablecer este árbol en las decenas de millones de hectáreas habitables en toda Europa quizás parece una tarea difícil. No obstante, los científicos creen que puede ser un proceso sencillo. "Tras la eliminación de algunas especies de plantas, los álamos se han abierto camino de forma natural en los bosques centroeuropeos", afirma Kusbach. "Así que esto podría considerarse una solución que se ha estado escondiendo a plena vista".

Un árbol popular, también en Norteamérica

El álamo temblón euroasiático, Populus tremula, es una de las seis especies de álamo del género Populus, que se extienden por gran parte del hemisferio norte. En conjunto, estas especies albergan una biodiversidad superior a la de los bosques circundantes.

Por su parte, el Populus tremuloides es el árbol más ampliamente distribuido en Norteamérica, donde también se le conoce como especie pionera, ya que facilita una elevada biodiversidad incluso cuando el clima cambia.

"A veces se dice que en Norteamérica se puede caminar de costa a costa sin alejarse nunca de la sombra de un álamo", cuenta Rogers. "Puede que no sea literalmente cierto, pero habla de la flexibilidad y adaptabilidad de estos bosques. Ahora comprendemos mejor el gran potencial del álamo temblón para prosperar también en Europa".

Referencia

Kusbach, A. et al., "Eurasian aspen (Populus tremula L.): Central Europe’s keystone species hiding in plain sight". PLOS ONE (2024).

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias