El pasado miércoles 19 de octubre a las 12.00 horas una concentración frente al Congreso de los Diputados mostraba el descontento de los trabajadores de Renfe. A esta manifestación se suman tres días de huelga en los meses de octubre y noviembre, convocados por la Unión General de Trabajadores (UGT) para protestar por la falta de avance en el acuerdo del III convenio colectivo de los trabajadores.

La decisión de convocar esta huelga se conoció el pasado viernes, tras una reunión de mediación en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) que acabó sin acuerdo. Los sindicatos Comisiones Obreras (CCOO), UGT y Semaf (Sindicato Español de Maquinistas Ferroviarios) informaron de tres jornadas de huelga en Renfe que afectará a Cercanías, Rodalíes y media distancia.

UGT estima que el Grupo Renfe "está bloqueando unilateral y deliberadamente la negociación colectiva", lo que está suponiendo "graves perjuicios al conjunto de la plantilla". Este sindicato ha lanzado un comunicado donde afirman que buscan una solución al conflicto, pero que no permitirán que "la empresa continúe ninguneando la negociación sin aportar soluciones a los problemas e intereses de la plantilla".

Días de los paros convocados

La huelga de Renfe ha sido emplazada en las siguientes fechas:
- Viernes, 28 de octubre: de 00.00 horas hasta las 23.00 horas.
- Lunes, 7 de noviembre: desde las 06.00 horas hasta las 9.00 horas y desde las 18.00 horas hasta las 20.00 horas.
- Viernes, 11 de noviembre: desde las 06.00 horas hasta las 9.00 horas y desde las 18.00 horas hasta las 20.00 horas.
El primer día de la huelga de Renfe, 28 de octubre, coincide con la operación de salida del puente de Todos los Santos.

Los servicios mínimos que deben operar durante los paros aún no están definidos. Es competencia del Ministerio de Transporte, pero normalmente no se define hasta la misma semana de los paros.

Lo que piden los sindicatos

Los sindicatos aseguran que no existe avance en el acuerdo del III convenio colectivo desde hace un año y, además, afirman que los planteamientos y propuestas realizados "no están siendo atendidos".

La demanda principal por parte de CCOO es la creación de empleo, ya que consideran que las condiciones actuales de los trabajadores resultan "insuficientes" para asumir las cargas de trabajo. Además, declaran que con esta medida dejarían de externalizarse ciertas actividades que son propias de la empresa.