Unas 4.000 hectáreas han quedado arrasadas por el incendio que se declaró el lunes en la comarca cacereña de Las Hurdes y que pasó a la provincia de Salamanca, a la zona de Monsagro, donde las labores de extinción se están complicando y las llamas han comenzado a extenderse hacia el municipio de Serradilla del Llano. 

El incendio esta presentando un comportamiento desigual: frente a las complicaciones en Monsagro (Salamanca) por el humo y las altas temperaturas, en Las Hurdes evoluciona favorablemente, aunque preocupa que el viento de cierta intensidad que se espera esta noche pueda reactivar las llamas.

El fuego de Monsagro, que entró desde la comarca cacereña de Las Hurdes el lunes 11 de julio por la tarde, está adquiriendo un comportamiento "extremadamente virulento", según la Junta de Castilla y León. El fuego se extiende hacia Las Batuecas. Según han comentado varios bomberos a Público, el escenario es "complicado" en Monsagro, con "vientos cambiantes" que dificultan las labores de extinción. El Ejecutivo castellano y leonés, además, ha advertido de que las velocidades de propagación son "muy extremas" y el trabajo del personal de tierra resulta "más arriesgado". 

Las llamas han quemado ya más de mil hectáreas en Salamanca. Ahora se están extendiendo hacia el municipio salmantino de Serradilla del Arroyo. Según ha informado la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, las condiciones actuales "no son favorables", lo que provoca que el escenario siga siendo "complicado". Unos 400 vecinos de Monsagro han sido desalojados de sus casas.

Por contra, la evolución del incendio es "favorable" en Extremadura, pero la complejidad del incendio radica especialmente en que se está comportando de forma "muy inestable", según ha explicado a los medios Nieves Villar, directora general de Emergencias de la Junta de Extremadura. "Nos está costando bastante resolver la situación", incide Villar.

"Tenemos mucho perímetro que atender y con las condiciones meteorológicas que tenemos estamos teniendo reactivaciones continuas", ha explicado a El Periódico de Extremadura, Juan Jesús Sánchez Corrales, coordinador regional del Infoex. Ahora la atención se centra en que este incendio, que ya ha quemado en Extremadura cerca de 3.000 hectáreas, no comprometa la seguridad de la localidad de Casares de Hurdes: en estos momentos no hay peligro para este término municipal, pero hay que estar pendientes del viento.

Nieves Villar ha señalado que Casares de Hurdes es el municipio que ahora mismo está más cerca del fuego y por ello se ha filiado a toda la población, se han estacionado varios autobuses a las inmediaciones del pueblo y se ha realizado un traslado preventivo de personas vulnerables que viven en la residencia de mayores de esta localidad.

El Centro de Atención de Urgencias y Emergencias 112 de Extremadura ha procedido al traslado preventivo de once residentes del centro de mayores de Casares de las Hurdes hasta otros en Pinofranqueado y Hernán Pérez, ambas localidades de la provincia de Cáceres.

Este miércoles por la tarde trabajan en la zona siete medios aéreos, que cuentan con el apoyo del Ministerio de Transición Ecológica y efectivos de Castilla y León. Asimismo, sobre el terreno luchan contra las llamas nueve unidades terrestres, cinco agentes del medio natural, ocho técnicos y tres unidades de maquinaria pesada.

Por otro lado, según ha informado el 112, se ha procedido a cortar la carretera CC.55.3, de Casares de las Hurdes al límite provincial con Salamanca, la segunda en la zona, tras el corte ya establecido en la CC-158.