Los bancos españoles necesitan preservar el capital para hacer frente a un posible deterioro de las perspectivas económicas, advirtió el viernes el Banco de España. El banco central dijo que los riesgos para la estabilidad financiera habían aumentado desde su último informe al respecto en abril.

El jefe de estabilidad financiera de la institución, Ángel Estrada, también advirtió que las medidas de alivio hipotecario que están preparando el Gobierno y los bancos deben ser temporales y estar dirigidas sólo a los hogares vulnerables.

"(Las medidas) deben identificar el colectivo al que se dirige (...) y que las ayudas a las actuales hipotecas no suponga incrementar el coste de futuros clientes (hipotecarios)", dijo Estrada en una rueda de prensa.

Aunque se espera que la subida de los tipos de interés impulse los márgenes de intereses de los bancos a corto plazo, los supervisores financieros han advertido recientemente de los riesgos derivados de la guerra en Ucrania en un momento en que la recesión se cierne sobre Europa.

"Todo ello recomienda una política prudente de planificación de provisiones y planificación del capital, que permita destinar el incremento de los beneficios que se está produciendo en el corto plazo para aumentar la capacidad resistencia del sector", señaló en su informe semestral de estabilidad financiera.

El banco central espera que la elevada inflación en España presione aún más las perspectivas económicas en los próximos trimestres, después de haber recortado recientemente su previsión de crecimiento para 2023 al 1,4%, frente a la tasa del 2,8% prevista anteriormente.

Aunque los bancos españoles, entre los que se encuentran el Santander y el BBVA, han registrado mayores beneficios en el tercer trimestre, las ganancias se vieron ensombrecidas por el aumento de las provisiones contra morosidad.

El Banco Central Europeo también ha recomendado prudencia y su máximo supervisor , Andrea Enria, pareció poner fin a una temporada de grandes recompras de acciones por parte de los bancos a medida que la economía se debilita.

Las entidades de crédito españolas han aumentado su remuneración a los accionistas mediante el aumento del pay-out o porcentaje del beneficio destinado a dividendo, que se sitúa entre el 40% y el 60%, la recompra de acciones o una combinación de ambas. "Los ratios de pay-out que tienen las entidades españolas se encuentra en torno a la media o por debajo de la media de los sistemas bancarios (de nuestro entorno), pero la recomendación de ser prudentes sigue encima de la mesa", dijo Estrada.

El Banco de España también dijo que una reciente propuesta de impuesto a la banca perjudicaría la rentabilidad y la generación de capital de los bancos en los próximos dos años, en línea con la opinión no vinculante del BCE.