Indra ha registrado un beneficio neto de 116 millones de euros hasta septiembre, un 0,9% más que en 2021, y ha disparado sus ingresos en un 19%, hasta los 2.694 millones de euros.

La compañía ha registrado un beneficio bruto de explotación (Ebitda) de 282 millones de euros, lo que supone un incremento del 9,7% respecto al año anterior, según los resultados económicos publicados este miércoles al cierre de mercado.

De este Ebitda, 154 millones de euros corresponden a Minsait, la filial de soluciones digitales del grupo, que ha crecido un 14,8% en esta magnitud en los nueve primeros meses del año, y 128 millones de euros a Transporte y Defensa, lo que supone un 6,6% más interanual.

Por otro lado, el Ebit reportado ha alcanzado los 204 millones de euros, un 19% más que en el año anterior si se excluye el extraordinario de la venta de la venta de las instalaciones de San Fernando de Henares.

Asimismo ha llegado al último tercio del año con una contratación de 3.130 millones de euros, un 21% más, y una cartera de proyectos que se eleva hasta los 5.983 millones de euros, lo que supone un incremento del 11,6% respecto al mismo periodo del año anterior.

Además, la deuda neta ha caído un 56,2% en tasa interanual, hasta los 220 millones de euros y más de 20 millones de euros desde que comenzó el año.

Por volumen de ingresos, el país sigue siendo el principal mercado de la tecnológica generando un 49% de los ingresos, frente a un 20% de América, 17% de Europa y un 14% en Asia, África y Oriente Medio. Por divisiones, Transporte y Defensa ha facturado 865 millones de euros, un 4,7% más; en el caso de Minsait, los ingresos han crecido un 19% hasta los 1.829 millones de euros.

En cuanto a la plantilla, la entidad ha sumado más de 4.500 empleados en lo que va de año y cerró septiembre con 55.853 trabajadores en nómina, casi 30.000 de ellos en España.

Más adquisiciones

En la presentación de resultados, el consejero delegado de Indra, Ignacio Mataix, ha asegurado que espera comenzar el proceso de firma del Futuro Sistema de Combate Aéreo Europeo (FCAS) en las próximas semanas después de los "avances significativos" para llegar a acuerdos de sus dos socios en el proyecto (Airbus y Dassault). Mataix ha subrayado que el proceso de firma es largo y que incluye a los estados participantes (España, Francia y Alemania), por lo que no espera que el programa arranque su operativa a un ritmo completo hasta la primera mitad de 2023.

El programa cuenta con algo más de 500 millones de euros consignados en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2023.

Mataix también ha asegurado que en las próximas semanas podría haber alguna novedad sobre adquisiciones de la firma, que este año ya ha incorporado varias compañías a su perímetro como la extremeña especializada en Identidad Digital Mobbeel y la firma de simuladores Simumak.

Durante la conferencia, Mataix ha señalado que no se ha percibido "debilidad" en la demanda por parte de los clientes, lo que permite a la firma llegar al último trimestre de año con una cartera que roza los 6.000 millones de euros.