Como otras grandes petroleras europeas en la actual temporada de resultados, Repsol logró un beneficio trimestral mejor de lo esperado gracias al rumbo alcista de los precios del crudo y el incremento de la producción tras retomarse el bombeo en Libia.

En el periodo, el precio del barril de crudo marcó una media de 53,7 dólares, un 58% más, mientras que Libia, donde la extracción es más rentable que en otros yacimientos del grupo, fue de 20.000 barriles de equivalente de petróleo al día (bpd). Hace un año Libia no producía petróleo por el conflicto en el país.

En la teleconferencia con analistas, el director financiero de Repsol, Miguel Martínez, dijo que si los acontecimientos se desarrollaban con normalidad en un país que emerge de diversos conflictos armados después de seis años, la producción podría estabilizarse en los 30.000 bpd el año que viene.

El crudo y Libia neutralizaron la evolución del negocio de refino que, pese a mostrar resistencia en márgenes, se vio afectado por varias paradas de mantenimiento en España y por la salida del perímetro del negocio de GLP. En el mes de abril, el margen de refino volvió a escalar hasta los 7,2 dólares por barril y Martínez se mostró optimista de cara al resto del año.

El beneficio neto ajustado a extraordinarios y a coste constante de inventario (CCS) de la petrolera española creció más del 10% a 630 millones de euros entre enero y marzo, cuando los analistas consultados por Reuters habían apostado por un descenso del 7% a 530 millones.

El EBITDA ajustado a CCS de la petrolera creció un 39,4 por ciento a 1.731 millones de euros.

Desde el punto de vista financiero, la deuda neta del grupo se situó a finales de marzo en 8.345 millones de euros, frente a 8.144 millones en diciembre de 2015 por un incremento del fondo de maniobra, aunque el ratio deuda neta/Ebitda CCS bajó de 1,38 a 1,21 veces, alineándose con el objetivo anual (1,1-1,2 veces).

Repsol destacó que en el primer cuarto del año consiguió ya la cuarta parte del programa de ahorros que se ha marcado para el año (más de 500 millones frente a un objetivo de sinergias de 2.100 millones) y mantuvo sus principales objetivos para el conjunto de 2017.

"(Son) Buenos resultados, donde destaca la aportación significativa del Upstream por primera vez desde la compra de Talisman", dijo Álvaro Navarro, analista de Intermoney.

Sin embargo, las acciones de Repsol, que han subido un 38% en los últimos doce meses, bajaban un 0,8% en un mercado alcista.