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entrevista a la portavoz de unidas podemos en la asamblea de madrid

Alejandra Jacinto: "Ayuso y Almeida están heridos de muerte por la corrupción y no nos conformamos con ser la oposición"

entrevista Alejandra Jacinto
Alejandra Jacinto, portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid, tras su entrevista en 'Público'.  Fernando Sánchez

Alejandra Jacinto (Madrid, 1989) piensa que tanto Isabel Díaz Ayuso como José Luis Martínez Almeida están "heridos de muerte" por la corrupción. En este contexto, la izquierda debe ponerse a trabajar, piensa, para avanzar hacia la configuración de un proyecto político que, ante todo, debe "incorporar a la sociedad civil".

Jacinto cree que es pronto y temerario para hablar de siglas, organizaciones y listas electorales, pero advierte de que este proyecto no puede "conformarse con encabezar la oposición ni en la Comunidad ni en el Ayuntamiento de Madrid". "Estamos ante un momento de excepcionalidad política y tenemos la oportunidad de desalojar a la derecha", agrega.

Avisa la portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid de que la ley de vivienda que se tramita en el Congreso no debe servir solo para limitar los alquileres: "Hay que bajar los precios, pinchar ya la burbuja", defiende, y también implicar a los fondos de inversión y a las entidades financieras en la conformación de un parque público de vivienda. En esta entrevista con Público hace un repaso de toda la actualidad política de Madrid y del resto del Estado.

Su partido forma parte de la oposición a Ayuso en la Comunidad de Madrid. ¿Cree que el PP y el Gobierno madrileños van a experimentar algún cambio con la llegada de Feijóo a la presidencia del partido?

Yo creo que la señora Ayuso está herida de muerte por la corrupción que afecta a su Gobierno, en particular a su hermano, todo el entorno familiar de la señora Ayuso, que se habría beneficiado de contratos, de mordidas considerables en la gestión de la pandemia. Cuando Feijóo llega a la presidencia del PP lo que hace es bendecir la corrupción de la señora Ayuso, quitarle hierro. Pero lo cierto es que hay unas irregularidades que son tan evidentes que a la Fiscalía Anticorrupción se le suma ahora la Fiscalía europea, lo que pone de manifiesto que todo el entorno de la señora Ayuso se habría beneficiado del peor momento de la pandemia, cuando morían 800 personas al día, cuando nuestros mayores fallecían en residencias, de una forma mezquina y cruel, y absolutamente deleznable.

No creo que vaya a cambiar demasiado. Es cierto que el hecho de que Ayuso no esté en la ejecutiva nacional [del PP] es un gesto que pone de manifiesto que, a pesar de que la arropen, quizá le han puesto unas banderillas rojas por si la señora Ayuso acaba siendo investigada o, incluso, condenada por el caso de corrupción, pero creo que no va a cambiar nada. El PP de Feijóo es el mismo que el de Ayuso, el mismo que el del señor Almeida, que parece que va a compartir méritos con Ayuso por haber hecho exactamente lo mismo en el Ayuntamiento de Madrid, aunque de forma más obscena todavía por lo que hemos conocido estos días. Es el mismo PP que el de la Gürtel, que hay que recordar que este viernes la Audiencia Nacional acaba de condenar nuevamente al PP por el caso de la Gürtel, esta vez por el caso de Boadilla.

Hablaba de la "herida de muerte" de Ayuso. ¿Está también Almeida herido de muerte? ¿Cree que aguanta lo que queda de legislatura?

Creo que no. Lo que ha sucedido en el Ayuntamiento de Madrid es igual de grave que lo que ha sucedido en la Comunidad, es decir, que el entorno más cercano se haya beneficiado, se haya lucrado y haya saqueado las instituciones, con nuestro dinero e impuestos, ahora que hablan de bajar impuestos, está dañando la imagen del alcalde. No hay impuesto más caro que el de la corrupción del PP. Nosotros nos vamos a personar en la causa que acaba de abrir el juzgado de instrucción porque pensamos que el Ayuntamiento de Madrid ha generado connivencia con esa operación de saqueo de las instituciones públicas y eso es muy grave. El alcalde de Madrid no puede representar eso, así que o debería dimitir o se debería presentar una moción de censura, y creo que no va a aguantar la legislatura.

El Gobierno de la Comunidad de Madrid se ha comprometido con Unidas Podemos a sacar adelante una ley de infancia. ¿Se fían de Ayuso en este sentido? ¿Se ha hablado algo sobre contenidos y plazos?

Conseguimos arrancarle un compromiso para que Madrid actualizara su ley de infancia, una ley que estaba obsoleta, sobre todo a raíz de conocer el caso tan grave de trata en los centros de menores. A partir de ahí no hemos vuelto a tener noticia del compromiso de la señora Ayuso con nosotras; en paralelo, no nos hemos dejado de reunir con todas las organizaciones de protección de los derechos de la infancia y nosotras estamos haciendo ese trabajo paralelo para generar un borrador que luego trataremos de negociar con el Gobierno. Pero negociar con este Gobierno es absolutamente difícil porque les ciega el sectarismo y hay que recordar cómo en los Presupuestos que aprobamos este año de las 1.654 enmiendas, más de 3.000 que presentamos todos los grupos de la oposición, no nos aceptaron ninguna. Les ciega el sectarismo aunque eso pase por sacrificar los intereses y los derechos de los madrileños y madrileñas.

IU Madrid ha anunciado que iba a trabajar para hacer un "frente amplio" en la Comunidad a nivel autonómico y municipal. ¿Está de acuerdo? ¿Lo ve posible?

Desconozco los detalles en los que IU está planteando ese frente amplio. A mí la palabra frente amplio en sí misma no es la que más me convence. No soy fetichista de una nomenclatura, igual que no soy fetichista de las siglas, pero lo que sí que creo es que estamos en un momento político en el que tenemos la necesidad de generar un proceso ilusionante, de apertura, de incorporación de la gente joven que no ha vivido los ciclos políticos anteriores, pero también de la sociedad civil que está organizada en las ampas, a través de las mujeres de la Cañada Real, que están organizadas también en los desahucios... Todo el tejido de movilización social que existe en la Comunidad de Madrid.

Hay que incorporarles a este proceso para poder generar las condiciones de posibilidad que llevaron a Ahora Madrid a conseguir la Alcaldía en el año 2015 y que, hay que recordar, nos quedamos por muy poco a punto de conseguirlo también en la Comunidad de Madrid. Estamos ante un momento de excepcionalidad política teniendo en cuenta las consecuencias de la pandemia, ahora la guerra, este pico de corrupción del PP, que es estructural pero que ahora aflora con toda su ferocidad de nuevo, y tenemos una oportunidad de desalojar a la derecha tanto del Ayuntamiento como de la Comunidad de Madrid, y creo que eso pasa por sumar fuerzas, ampliar, ensanchar, incorporar a los sectores sociales y, sobre todo, con no conformarnos con que Madrid sea propiedad del PP, y por no conformarnos con liderar la oposición en el Ayuntamiento y en la Comunidad de Madrid.

¿Es posible, a día de hoy, la alianza entre Más Madrid y Unidas Podemos? Mónica García y Pablo Iglesias no concurrieron juntos en las pasadas elecciones, aunque se intentó.

No estamos hablando de sopas de siglas ni de listas electorales, no es el momento de hablar de eso. Es el momento de empezar a generar un proceso en el que, evidentemente, cabe todo el mundo, no sobra nadie, no se le debe pedir el carné a nadie, igual que no se hace en una huelga feminista, parando un desahucio o cuando nos movilizamos con las vecinas de la Cañada o en las revueltas escolares en torno a los colegios. Cabemos todas, no solo los partidos, sino también integrando a la sociedad civil organizada que es necesaria para generar ese proceso ilusionante del que nos sintamos todas partícipes de generar un horizonte de posibilidad. Ayuso está herida de muerte, pero es que Almeida también lo está y el momento de excepcionalidad política lo requiere, requiere altura de miras y requiere no conformarnos con liderar la oposición, ser oposición, y creo que tenemos que ser sumamente generosas todas las fuerzas políticas.

El proceso de integración de la sociedad civil es una fase para configurar un proyecto, pero uno de los últimos pasos tiene que ver con la traducción jurídica de ese proyecto: las siglas, las candidaturas, las listas... ¿Se ve en una lista encabezada por Mónica García?

Creo que es anticiparnos. Estamos todavía en abril del año 2022, queda un año y un mes. Cuando llegue el momento, habrá que hablar de esas cuestiones, pero creo que no tenemos que poner el foco ahí porque no es lo que esperan y necesitan las gentes de Madrid progresistas, que nos llevamos todas un batacazo en las últimas elecciones y que necesitamos poner el foco en cómo se hace ese proceso, cómo somos capaces de cicatrizar heridas que se han vivido en ciclos anteriores; yo no he estado ahí, no he participado, pero me constan que están ahí. Hay que tener altura de miras y cuando llegue el momento habrá que hablar de todo eso, pero creo que sería temerario por mi parte hacerlo ahora. El momento ahora es el de poner en marcha un proceso que genere esas condiciones de posibilidad.

La unidad está de moda y mucha gente se referencia en Yolanda Díaz para hablar de sus procesos de confluencia, pero la vicepresidenta no ha dado ningún paso aún. ¿Creen que estos movimientos encajan y acompasan a ese proyecto?

Sin duda. Creo que Yolanda Díaz ha sido prudente con paralizar el proceso de escucha en esta coyuntura económica que nos preocupa muchísimo. Debemos concentrar todos nuestros esfuerzos para que este país salga adelante y de forma diferente a cómo se ha salido de crisis anteriores. El liderazgo de Yolanda es evidente, yo lo acompaño y me parece la mejor de las noticias. Todas las iniciativas que tributen en la misma dirección son las adecuadas.

En Madrid, en concreto, se habla de unir a todo lo que esté a la izquierda del PSOE, pero Yolanda Díaz ha insistido en que no quiere representar esa "esquinita" que le dejan los socialistas, que aspira a otra cosa, quizá a interpelar a sectores que en principio son menos afines.

Tenemos el reto de reconectar también con toda la gente que pueda estar comprometida con los valores progresistas, con los derechos humanos, que están trabajando en esa dirección, y por tratar de avanzar en un modelo de país y también en un modelo de región; estoy pensando en muchas entidades sociales que están trabajando por y para los derechos humanos y que, a lo mejor, no necesariamente se han sentido votantes de nuestra fuerza política, pero que tenemos el deber de tratar de incorporarles a ese proceso para tratar de ensanchar el espacio. En ese sentido, lo que está planteando Yolanda es lo más sensato y, además, es lo más ambicioso; entronca bien con el espíritu con el que nació Podemos.

entrevista Alejandra Jacinto
Alejandra Jacinto, durante un momento de la entrevista con 'Público'. Fernando Sánchez

Unidas Podemos ha presentado en el Congreso enmiendas a la ley de Vivienda. ¿Qué margen de mejora hay en esta norma? ¿Cuáles son las principales medidas que se deberían incorporar?

Yo quiero poner en valor en sí mismo el hecho de que haya un proyecto de ley de vivienda por primera vez en este país. Hay que recordar que llevamos 44 años sin que ese derecho haya sido desarrollado por parte de los poderes públicos y se ha vulnerado sistemáticamente, con condenas por parte de Naciones Unidas, que han señalado a nuestro país como vulnerador de este derecho humano que es la vivienda. El hecho de conseguir arrancar al PSOE una ley de vivienda garantista tiene un poder simbólico que no es menor y que hay que poner en valor. A partir de ahí, el texto que nace está bien como punto de partida, pero es necesario mejorarlo en cuanto a conseguir que ese texto sea lo más eficaz posible y que cuanto antes se desarrollen políticas públicas que consagren y que garanticen el derecho a la vivienda en este país.

Por eso hemos presentado enmiendas, no solo nosotros, sino también el resto de socios de la investidura y de la mayoría del Congreso plurinacional; lo han hecho también los sindicatos de inquilinas, la PAH, entidades del tercer sector que entienden que hay que ganar en eficacia en la ley, y nosotras lo tenemos claro. Hay que incorporar esas enmiendas para garantizar que los efectos de la ley se notan cuanto antes y eso pasa, por ejemplo, por conseguir que la limitación de los precios de los alquileres se aplique cuanto antes; no podemos esperar un año y medio a que las comunidades autónomas elaboren los índices, hay que hacerlo ya. La burbuja está en ciernes, está encima de nuestras cabezas, llevamos años de burbuja de los precios de los alquileres y hay que pincharla ya. Además, en un contexto de inflación galopante como la que tenemos, en la que hemos limitado la subida de los precios de los alquileres a un 2%, se hace más necesario que nunca conseguir pinchar ya los precios de los alquileres.

Tenemos que conseguir también que en este país se acabe de forma definitiva con lo desahucios sin alternativa habitacional adecuada. No tiene demasiado sentido que se paralicen por plazos que no garantizan que las administraciones públicas provean de esa alternativa habitacional necesaria. Una de las enmiendas principales es garantizar el cumplimiento de los tratados internacionales, que señalan que se tienen que parar los desahucios hasta que haya alternativa habitacional adecuada y eso significa hacerlo sin límite, más allá del que marque la administración en otorgar esa alternativa de vivienda que, por cierto, no vale una alternativa de un albergue en el que se separa a la familia y que supone un peregrinaje por distintos tipos de recursos habitacionales que no solucionan el derecho a la vivienda de una persona que acaba de sufrir un desalojo. Es importante corresponsabilizar a los actores privados, a las entidades financieras y fondos de inversión, en garantizar un parque de vivienda y, en ese sentido, deben ofrecer un alquiler social a las familias y personas que se encuentran en situación de desahucio. Eso también pasa por corresponsabilizar a la Sareb, una estafa que nos han hecho a la ciudadanía, y ahora que parece que se va a convertir en una herramienta pública, que no sea solo para socializar las pérdidas, sino que seamos capaces de incorporar todo ese parque de vivienda; en Madrid supondría incrementar el parque de vivienda social en un 15% de forma inmediata.

¿La limitación del 2% en la renovación de los alquileres recogida en el plan de respuesta al impacto económico de la guerra responde a un cambio cultural que también ha arrastrado al PSOE? ¿Cuesta menos ahora intervenir los alquileres?

Se evidencia todavía más esa necesidad. En un contexto de inflación en el que las familias destinan una media de 900 euros o mil al alquiler, asfixiando su capacidad económica, lo hace más evidente. Pero esto ha sido así en todos estos años. Tiene mucha importancia la labor de la sociedad, de los movimientos sociales en defensa del derecho a la vivienda, que llevan años señalando la problemática que supone para las mayorías sociales de este país el pago de los alquileres y, en ese sentido, creo que hay cierta consciencia colectiva que ha sido generada por la lucha constante. La prueba evidente es que no ha pasado nada por intervenir el mercado en un momento determinado y por decir que vamos a limitar las subidas. También creo que no nos debemos de conformar con limitar las subidas, hay que conseguir bajadas de los precios, pinchar la burbuja y que los precios de los alquileres se adapten a los precios de la vida.

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