El jefe del Pentágono, James Mattis, dio este lunes unas directrices provisionales sobre el veto a los transexuales del presidente estadounidense, Donald Trump, mientras resuelve las directivas definitivas.

"En primer lugar, seguiremos tratando a todos nuestros miembros con dignidad y respeto", dice Mattis en sus directrices, que como máximo estarán en efecto hasta el 21 de febrero de 2018.

Las normas provisionales ordenan suspender el reclutamiento de transexuales y prohíben las operaciones de cambio de género a partir del 22 de marzo de 2018, con la excepción de que sean "necesarias" para la salud del individuo.

La orden especifica que a las personas diagnosticadas con "disforia de género" seguirán recibiendo su tratamiento médico.

Sobre los transexuales que hayan completado su cambio de sexo, Mattis indica que podrán servir acorde con el género de su elección mientras dure la provisionalidad.

Trump veta la decisión de Obama

Trump anunció a finales de julio su decisión de prohibir que los transexuales sirvan "en ninguna capacidad" en las Fuerzas Armadas estadounidenses tras haber consultado, según aseguró, con sus "generales y expertos militares".

"Nuestras Fuerzas Armadas deben centrarse en la victoria decisiva y arrolladora, y no pueden ser lastradas con los enormes costes médicos y la perturbación que implicarían los transgénero", argumentó Trump en un anuncio en su cuenta de Twitter.

A finales de agosto, el presidente estadounidense ordenó al Pentágono que detuviese el reclutamiento de personas transexuales y también el pago del tratamiento hormonal a los que ya están en las Fuerzas Armadas, cuyo futuro laboral queda ahora en el limbo.

Las Fuerzas Armadas estadounidenses quedaron abiertas "con efecto inmediato" a los transexuales en junio de 2016 por decisión del expresidente Barack Obama, aunque su reclutamiento debía empezar en enero de 2018.

El número de transexuales que sirven en las Fuerzas Armadas oscilaba en 2016 entre 1.300 y 6.600 dentro de un total de 1,3 millones de integrantes del cuerpo militar, de acuerdo con un estudio encargado por el Pentágono.