El sumario del caso Tándem acaba de confirmar que el comisario José Manuel Villarejo, en prisión desde noviembre de 2017, hacía negocio con información de la agencia de detectives Método 3 que no consta en el procedimiento que se abrió tras el desmantelamiento de la empresa y la detención de su director, Francisco Marco. La Policía desmanteló la agencia después de hacerse pública la conocida conversación del restaurante La Camarga, entre la dirigente del PP Alicia Sánchez Camacho y la ex amante de Jordi Pujol Ferrusola, Victoria Álvarez.  

Según relata el propio Villarejo, que siempre ha justificado estas actuaciones en Catalunya dentro de sus obligaciones policiales y por orden de su superior, el ex número dos de la Policía Eugenio Pino, la información la obtuvo "de una fuente policial, no una fuente judicial", en concreto "de un antiguo empleado". 

Pero lo que más llama la atención es que parte de esos datos los utiliza en una conversación de julio de 2013 con sus clientes Susana García Cereceda, Francisco Peñalver y David Fernández, dos de ellos dueños de la lujosa urbanización madrileña La Finca. Y esa parte de la información incautada con la que el comisario negocia –cuando se encuentra bajo secreto de sumario– hace referencia a una investigación realizada por Método 3 que nada tenía que ver con Catalunya ni con la familia Pujol y que no consta en el juzgado número 14 de Barcelona, que instruye la causa contra la empresa de detectives desde febrero de ese año.  

"El informe no figura oficialmente en el sumario"

Los fiscales del caso Tándem, en su recurso contra el archivo de la pieza separada Land –donde se investiga el trabajo que el excomisario hizo para Susana Cereceda con el fin de incapacitar a su hermana Yolanda en la pugna familiar por la herencia–, citan dos reuniones que Villarejo mantuvo con estos clientes en las que les explica que la información está obtenida de manera ilegal y que no consta en el sumario. 

Así, en la reunión del 9 de julio de 2013, el comisario –que estaba todavía en activo y se hacía pasar por el abogado Manuel Villar ante Javier de la Rosa y por el periodista Javier Hidalgo ante Victoria Álvarez, ambos testigos de la causa contra los Pujol que instruye el jugado número 5 de la Audiencia Nacional– asegura: "Es importante un dato, en el sumario que hay, que está declarado secreto, el sumario que hay contra Método 3 y tal, no figura casi ninguno de estos informes, eh, o sea este informe no figura oficialmente en el sumario o sea que aunque se haga la personación y tal". Y añade: "Nuestra fuente es una fuente policial no es una fuente judicial". 

Transcripción judicial de una de las conversaciones de Villarejo con sus clientes, propietarios de la lujosa urbanización La Finca.

En otra reunión, el 24 del mismo mes, Villarejo explica que ha pagado por la información a un ex empleado de la agencia, lo que vendría a desmentir las declaraciones que ha hecho ante diferentes juzgados acusando al exjefe de la Unidad de Asuntos Internos, Marcelino Martín-Blas, de hacerse con la información de Método 3, supuestamente sustrayéndola de un registro policial al que ni siquiera asistió. 

El comisario asegura ante su socio, Rafael Redondo y que también está imputado en Tándem por blanqueo de capitales y organización criminal, y sus clientes Susana García-Cereceda y Francisco Peñalver:

"Si os parece, como vosotros vais a entender mucho más que nosotros, son ciento treinta páginas nada menos ¿no?, que nos las han cobrado a precio de...". Y les sitúa cómo ha obtenido la información: "tenemos ahí una fuente dentro de la extinta de esta agencia, que no tal, pero hombre, el que nos la ha conseguido es un antiguo empleado, que de alguna cosa que interese: Oye que cómo ha llegado hasta ahí, cómo no sé qué, quién ha facilitado esa información..."

Transcripción judicial de parte de la conversación de Villarejo y su socio Rafael Redondo con Susana García-Cereceda y Francisco Peñalver celebrada el 24/07/2013.

Proteger a Sánchez Camacho y Cospedal tras La Camarga

Desde que Público destapara la Operación Cataluña en 2015 –al revelar las conversaciones entre Javier de la Rosa y un supuesto abogado, Manuel Villar, que en realidad era el comisario Villarejo–, el policía y la brigada política de las cloacas de Interior han intentado desentenderse de toda la información que habían obtenido ilegalmente y que, en origen, provenía de la ex dirigente del PP Alicia Sánchez Camacho, tras la conversación que mantuvo con la ex de Jordi Pujol Ferrusola, Victoria Álvarez, en el restaurante La Camarga y que fue grabada por detectives de Método 3, a petición de la primera.

Durante este tiempo, idearon un montaje que apuntaba al comisario Marcelino Martín-Blas quien investigaba a Villarejo y a la cúpula policial en la causa del pequeño NIcolás. Pero en otra de las conversaciones que aparecen en la operación Tándem –en este caso en la pieza separada Pintor en la que se investiga a Juan Muñoz, empresario y marido de la presentadora Ana Rosa Quintana, y a su hermano– Villarejo explica que todo esto lo hace con el objetivo de tapar a la ex secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal. 

Según desveló El País, Villarejo se refiere a Cospedal y menciona a “Alicia”, en referencia a la entonces líder del PP en Catalunya Alicia Sánchez-Camacho:

“Sí, van a por Alicia, pero Alicia es tronca total de ella, de Cospe, y, claro, van a presentar de ella una imagen diciendo 'la Operación Cataluña la monta la Cospe y la caga'... y ahora viene la pequeñita [en referencia a la ex vicepresidenta del Gobierno de Rajoy, Soraya Saénz de Santamaría] y con diálogo lo va a salvar, ¿sabes? Ése es el discurso para que todo el mundo se lo crea, ¿no? Y, claro, he dicho al final que como la Operación Cataluña yo la he diseñado... van a decir '¿y tú?' Porque ya me lo han dicho: 'si tú derrotas [confiesas] que es la Cospe la que tal, contra ti, no vamos'...”

...CONTINUARÁ