Feijóo pasa por encima de su programa para castigar al Gobierno con la Agencia de Salud Pública

Pleno convulso el de este jueves en el Congreso de los Diputados. Con Alberto Núñez Feijóo en Bruselas en la cumbre del Partido Popular Europeo, su bancada se ha rebelado contra la negativa de la Presidencia del Congreso a modificar el orden del día del pleno, como exigía el PP, para retirar el debate sobre la ley de desperdicios alimentarios. El cabreo de los populares ha sido descomunal, hasta el punto de que han votado en contra, junto a Vox y Junts per Catalunya, de la Agencia Estatal de Salud Pública; impidiendo así que saliese adelante, como preveía el Ministerio de Sanidad después de haber logrado que todos los grupos salvo Vox apoyaran el proyecto en la Comisión. 

Una nueva maniobra política contra el Gobierno con la que el PP ha pasado por encima incluso de su programa electoral. Una de las promesas de Feijóo en la campaña para las elecciones generales de 2023 fue "retomar" la creación de la Agencia Estatal de Salud Pública "garantizando la participación de las Comunidades Autónomas en la gobernanza de la misma y la fijación de sus prioridades". 

En febrero de 2024, el PP también registró en el Congreso de los Diputados una proposición no de ley por la que pedía al Gobierno que pusiera en marcha de "de forma efectiva" la Agencia Estatal de Salud Pública antes de que terminase el año. 

Según el portavoz del PP, Miguel Tellado, el cambio en el sentido de su voto ha tenido que ver con la presentación del nuevo organismo que hizo Mónica García, ministra de Sanidad, desde la tribuna y no con la bronca a cuenta de la ley de desperdicio alimentario. Sin embargo, Cuca Gamarra, secretaria general del partido, ha sido clara: "Cuando se impide que el Congreso, como ha como ha hecho hoy el presidente en funciones, que ha impedido y ha bloqueado que se pueda votar aquello que el Senado ha aprobado, lo que no pueden pretender luego es que no haya una reacción". "Después de insultar, no había mucho ya a favor (de la Agencia de Salud Pública)", añadió Gamarra a su llegada a un coloquio en el Club Siglo XXI en el que participaba el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda.

Lo que motivó el enfado del PP han sido cuatro enmiendas a la ley de desperdicio alimentario aprobadas por el Senado. Dos de ellas las había introducido el PP. La Mesa del Congreso tomó la decisión de vetar esas cuatro modificaciones a la norma porque, de acuerdo con la visión de la mayoría progresista de la misma, afectan al presupuesto del Gobierno. En concreto, las dos enmiendas más polémicas son las que tienen que ver con una rebaja del IVA del 2% a los alimentos básicos hasta final de año y con el régimen de retribución transitorio para las plantas de cogeneración cuya vida útil ya haya terminado.

El PP tachó la decisión de "arbitraria" e intentó desde primera hora de la mañana que la ley de no se debatiera en el Pleno de este jueves al no estar de acuerdo con el veto. Tellado forzó una reunión de la Junta de Portavoces a las ocho de mañana para ello, pero la Presidencia del Congreso lo rechazó porque, según fuentes de la Cámara, eso solo se puede hacer con el acuerdo de todos los portavoces. Sin embargo, desde el PP ponen sobre la mesa el Reglamento del Congreso, que especifica en su artículo 68.1 que "el orden del día del Pleno puede ser alterado por acuerdo de éste, a propuesta del Presidente o a petición de dos Grupos Parlamentarios o de una quinta parte de los miembros de la Cámara".

Mismo movimiento de Junts

El desenlace del embrollo descolocó al Gobierno: la ley del desperdicio alimentario salió adelante sin modificaciones, pero, a cambio, las derechas de PP, Vox y Junts dejaron caer la creación de la Agencia Estatal de Salud Pública, que se podría haber convertido en el primer texto legal impulsado por Sumar en ser aprobada durante la actual legislatura. No sin ruido por parte de los populares, que protestaron desde sus escaños durante más de diez minutos, interrumpiendo el Pleno. 

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También Junts se sumó a ese castigo al Gobierno. "Ninguna agencia española está por encima de los agricultores y ganaderos catalanes", justificó la portavoz del partido independentismo, Miriam Nogueras. Una de las polémicas enmiendas vetadas por la Mesa la introdujeron Junts y ERC.