Errejón se niega a entregar su móvil pero propone ir al juzgado a enseñar sus conversaciones con Mouliaá

La defensa del exdiputado Íñigo Errejón ha pedido al juez que le investiga por agresión sexual a la actriz Elisa Mouliaá que suspenda la entrega de su móvil hasta que la Audiencia Provincial determine si el requerimiento es pertinente. Sin embargo, el exportavoz de Sumar ha propuesto acudir al juzgado para mostrar directamente el contenido de las conversaciones al juez. 

Así consta en un escrito presentado por Errejón ante el Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid, en el que su defensa afirma que "la práctica de dicha diligencia afecta gravemente al derecho fundamental a la intimidad, personal y profesional" del expolítico.

Aún así, el documento explica que mientras que se resuelve el recurso de apelación pendiente relativo a esa diligencia "no tiene ningún inconveniente" en que Errejón comparezca personalmente ante la letrada de la Administración de Justicia para exhibir el contenido de su móvil relacionado con Mouliaá. 

Elisa Mouliaá, por su parte, ha acudido al juzgado que investiga si Errejón la agredió sexualmente a entregar su teléfono móvil, como ordenó el juez. Sin embargo, no ha podido hacerlo porque el magistrado Adolfo Carretero ha comunicado a su letrado que no hay medios suficientes. La Policía se encargará de citarla para que lo entregue en otro momento.

La actriz ha acudido a notaría después de su visita al juzgado y ha cedido un piso que compró con el dinero que le pagaron por varias entrevistas televisivas a una ONG para ayudar a mujeres víctimas de maltrato y agresión sexual. 

Su letrado, Alfredo Arrién, ha explicado que Mouliaá compró recientemente un piso por 470.000 euros en el que invirtió los 54.000 que ganó por contratos televisivos tras hacerse pública su denuncia contra Íñigo Errejón por presunta agresión sexual. 

Un 30% del tamaño del inmueble, que tanto la actriz como letrados estiman que equivale a dos habitaciones, serán para que la ONG aloje a mujeres que necesitan ayuda, acompañadas de sus hijos si es que los tienen. El otro 70%, (dos habitaciones y otras zonas comunes) se destinará a alojamiento turístico que gestionará la ONG y servirá para sostener la iniciativa y pagar los gastos. 

Las mujeres que se alojen en este piso podrán trabajar en el mismo, dando el servicio de alquiler turístico, según ha explicado Mouliaá.