Un juzgado de Barcelona ha abierto una causa para investigar a la madre de Dani Alves por la difusión de un vídeo con imágenes personales de la víctima del futbolista brasileño, condenado a cuatro años y medio de cárcel por violación. Lucía Alves no solo publicó en sus redes sociales las fotografías de la joven, sino que también reveló su identidad. Los hechos tuvieron lugar el 30 de diciembre de 2023.

El Juzgado de Instrucción número 21 de Barcelona ha abierto diligencias para investigar la publicación de las imágenes, que además estaban editadas, según ha informado El Periódico. La víctima denunció ante los Mossos d'Esquadra que la madre de su agresor había compartido en Instagram vídeos antiguos en los que ella salía bailando con sus amigas. Además, Lucía Alves también desveló el nombre y los apellidos de la joven. 

La madre del futbolista también acusaba a la víctima de "querer fama" y "dinero" en la misma publicación. Lucía Alves acabó retirando el vídeo de su perfil de Instagram unos días antes de que arrancara el juicio contra su hijo en la Audiencia de Barcelona, aunque las imágenes llevaban varias semanas circulando por Internet. El Juzgado de Instrucción número 15 de la capital catalana había prohibido previamente filtrar cualquier dato que pudiera identificar a la víctima. 

Las imágenes fueron publicadas en la cuenta de la madre de Dani Alves el pasado 30 de diciembre, cuando se cumplía justo un año de la
agresión sexual. "Quien confía en Dios no pierde la batalla", rezaba la publicación. En el vídeo difundido aparecía la víctima de fiesta con sus amigas. La prensa brasileña y algunos medios españoles se hicieron eco de las fotografías y llegaron a reproducir algunos cortes. 

La abogada de la víctima, Ester García, emitió en su momento un comunicado para anunciar acciones legales y recordar que la difusión de imágenes atenta contra la intimidad de la víctima y supone un "delito flagrante". Además, la letrada denunció la avalancha de mensajes de odio y amenazas que tuvo que recibir durante esos días la denunciante. Lucía Alves y los medios que compartieron los vídeos se enfrentan ahora a un procedimiento penal por los delitos de revelación de secretos, contra la integridad moral y obstrucción a la Justicia. El futbolista ha sido condenado a cuatro años y medio de cárcel por violación. La Fiscalía pedía nueve y la acusación particular, 12.