La expansión que estaba prevista para el aeropuerto londinense de Heathrow fue declarada ilegal este jueves por la justicia británica por motivos de emisiones. Una decisión que podría tumbar un proyecto de 18.000 millones de dólares que ha estado acosado por disputas e indecisión durante décadas.

En una victoria para los defensores de la lucha contra el cambio climático, un juez del tribunal de apelaciones reiteró que el hecho de no tener en cuenta los compromisos del gobierno en materia de cambio climático era algo "legalmente fatal" para los planes de construir una tercera pista en el aeropuerto más concurrido de Europa.

El primer ministro, Boris Johnson, se ha había opuesto vehemente a la ampliación, que había sido aprobada por el gobierno anterior. Durante la campaña electoral del año pasado, añadió que tendría que encontrar la manera de cumplir una vieja promesa de tirarse frente a las excavadoras en Heathrow para frenar estos planes.

El gobierno apuntó que no apelaría el fallo, planteando interrogantes sobre el futuro de un proyecto que ha generado mucha controversia en Reino Unido durante casi medio siglo. Para que la nueva pista de aterrizaje pueda construirse, el Departamento de Transporte tendría que enmendar su declaración de política, pero no dijo nada al respecto el jueves.

"Nos tomamos en serio nuestros compromisos con el medio ambiente, el aire limpio y la reducción de las emisiones de dióxido de carbono. Consideraremos cuidadosamente este complejo juicio y estableceremos nuestros próximos pasos a su debido tiempo", apunta el ministro de Transporte, Grant Shapps.

Heathrow y sus partidarios sostienen que la salida de Reino Unido de la Unión Europea hace que el proyecto de expansión sea crítico para asegurar que el país pueda aumentar el comercio con el resto del mundo. La tercera pista prevista sería la primera pista completa construida en el área de Londres en 70 años.

Heathrow es el puerto más grande del Reino Unido por su valor, ya que representa el 40% de las exportaciones en 2019, pero sus dos pistas ya funcionan a plena capacidad y el aeropuerto será eclipsado en dos años por París como el aeropuerto con más tráfico de Europa, después de que fracasasen intentos anteriores de ampliarlo.

Hace diez años, se desechó un plan para una nueva pista, antes de que una comisión designada por el gobierno realizara un estudio de tres años que recomendó nuevamente su ampliación en 2015, dando lugar al último proyecto.

Heathrow Airport -propiedad del grupo español Ferrovial , el fondo soberano Qatar Investment Authority y China Investment Corp- dijo que apelaría la decisión ante el Tribunal Supremo, aunque el gobierno no lo haya hecho.
"Este no es el final del camino. Esto se puede arreglar", afirma el CEO, John Holland-Kaye, a Sky News el jueves.

Heathrow cree que un plan de la industria de la aviación del Reino Unido lanzado recientemente para alcanzar la neutralidad en emisiones contaminantes en 2050 ayudará a que la decisión sea revocada.

En contraste, grupos de defensa del medio ambiente como Amigos de la Tierra y Greenpeace, y las autoridades locales que se oponían a la ampliación, se mostraron encantados con el fallo, asegurando que su reconocimiento de los compromisos sobre el cambio climático podría tener consecuencias en otros proyectos.