Si se visita Catalunya este verano las calas de la Costa Brava pueden ser una buena opción con mucho pedigrí, pero nada tienen que envidiar las de la Costa Daurada. La costa de Tarragona, más allá de Salou, tiene lugares ideales para disfrutar del agua en pareja, familia, amigos o en solitario, con algo más de pausa que las playas más masificadas, con rincones más recogidos y no tan abiertos y aguas más tranquilas. Por eso, os proponemos ocho de las mejores calas para disfrutar de la Costa Daurada este verano y combatir las olas de calor.

Playa del Torn (L’Hospitalet del Infant)

Empezamos por una playa nudista que es toda una referencia de este colectivo a nivel mundial y que se encuentra en la Costa Daurada, ubicada en el Espacio Natural Protegido de la Rojala-Playa del Torn. Se trata de un pequeño tramo del litoral de la localidad de l'Hospitalet de l'Infant, que goza de un gran interés paisajístico. Son habituales las actividades en la arena, así como pasear por el camino de ronda litoral. Un espacio idóneo para descansar y disfrutar de la naturaleza, gracias también, en buena medida, a su aislamiento natural.

Cala Jovera (Tamarit)

La cala Jovera de Tamarit (comarca del Tarragonès) es una de las calas vírgenes más icónicas de la Costa Daurada y de todo el litoral catalán, rodeada de vegetación autóctona y una pequeña apertura al mar. Muy cerca de Tarragona capital, esta cala se encuentra bajo el majestuoso castillo de Tamarit, construcción románica de entre los siglos X y XII, por lo que también se la conoce como cala del Castell. Tiene unos 90 metros de longitud y se accede a través del camino del castillo. Tiene arena fina y dorada, y un acceso suave a sus aguas que son cristalinas, cálidas y tranquilas.

Cala Fonda-Waikiki (Tarragona)

La playa del Arboçar de Tarragona es otra de las más conocidas de la Costa Daurada, especialmente en lo que se refiere a la práctica del nudismo sin desplazarse lejos de la ciudad. También conocida como cala Fonda o Waikiki, tiene unos 200 metros de longitud, arena fina y dorada, y se accede al mar a través de una pendiente muy suave. Se ubica en el Bosque de la Marquesa, dentro del Plan Especial de Interés Nacional Tamarit-Punta de la Móra, un espacio inigualable. Es de difícil acceso y se llega a través de un sendero de pinares señalizado, rodeado de acantilados y vegetación autóctona, por donde pasa un camino de ronda.

Playa de Calafat (L'Ametlla de Mar)

Pese al carácter agreste de gran parte del litoral de la localidad, se trata de una playa de arena muy fina, a lo largo de unos 100 metros de largo por 40 metros de ancho. Es accesible totalmente a pie y en coche. Una playa recogida y al mismo tiempo ideal para disfrutar con niños.

Playa de Cap Roig - El Perelló

A los pies de la urbanización de Cap Roig, en el municipio del Perelló, a las puertas ya de la zona de las Terres de l'Ebre, hay una gran playa de arena blanca, que destaca por su entorno: un gran pinar y varios acantilados con rocas de color anaranjado. Se puede llegar desde l'Ampolla por las calles de la urbanización de Cap Roig, en el extremo norte. Cerca de este lugar hay otras pequeñas calas como la de los Capellans, la del Morro de Gos o la de Santa Llucia.

Cala de les Sirenes (Mont-roig)

La cala de les Sirenes, de Mont-roig y Miami Platja (comarca del Baix Camp), tiene unos 170 metros de longitud, que combinan la arena fina y dorada con roquedales y unas aguas cristalinas. Se trata de un lugar tranquilo y pausado, pero con aparcamiento y duchas. La cala de les Sirenes tiene un acceso al mar bastante pronunciado, por lo que no es la más indicada para los niños.

Cala de la Penya Tallada (Salou)

En Salou encontramos la cala de la Penya Tallada, una pequeña cala de unos 47 metros de longitud, situada entre la Punta Roja y la pared rocosa que se adentra, que da nombre a este idílico lugar. Rodeada de pinos y vegetación, tiene unas aguas cristalinas y tranquilas. Se llega fácilmente a pie a través de la calle que lleva su mismo nombre o recorriendo el camino de ronda de Salou.

Cala de Pixavaques (L'Ametlla de Mar)

Y vamos hacia l'Ametlla de Mar (comarca del Baix Ebre), una localidad con varias calas envidiables, de la que destacaremos dos. La de Pixavaques es de fácil acceso y con varios servicios, gracias a su proximidad con el casco urbano, compartiendo espacio colindante con la cala Pepo. Se trata de un sendero relativamente pequeño, de 70 metros de longitud y 40 de ancho, que disfruta de la arena fina y caracterizada por un oleaje moderado, acentuado por fases ventosas esporádicas. Kayaks, piraguas y otros deportes náuticos son indicados para realizar en este espacio.