El presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, ha considerado que el interés de STC Group en la multinacional española le "anima", aunque "desgraciadamente" no tiene más noticias sobre los planes de esta multinacional saudí.

En la rueda de prensa de presentación de los resultados de 2023, el presidente de la operadora se ha referido al anuncio de STC Group de participar en el capital de Telefónica en un 9,9 %. "Que un inversor como STC se interese por Telefónica y que cuando anuncia su entrada en la compañía reitera lo atractivo que es desde el punto de vista de su proyecto industrial y su estrategia, nos anima", ha dicho Pallete, que, a reglón seguido, ha añadido que "desgraciadamente no tenemos noticias".

Tampoco le consta que el grupo Saudí haya presentado solicitud de autorización de su entrada en Telefónica al Ministerio de Defensa, al que tiene que dirigirse en caso de que sobrepase el 5% de participación en el operador.

STC Group ha adquirido un 4,9% de las acciones de Telefónica, y además tiene instrumentos financieros del operador, que podría convertir en acciones y conseguir hasta un 9,9 % del capital. Según la normativa vigente en España en materia de inversiones extranjeras, una empresa que quiera adquirir más de un 5% en una compañía considerada estratégica debe pedir permiso al Gobierno para superar ese umbral y comunicar sus intenciones, como, por ejemplo, si quiere un puesto en el consejo de administración de la misma.

Tampoco tiene noticias sobre la posible entrada del Estado a través de  la SEPI en Telefónica, después de que el Gobierno anunciara que había ordenado a esta sociedad pública hacerse con hasta el 10% de las acciones. Pallete desconoce también cómo se ejecutaría esta entrada, según ha dicho.

Además, Telefónica espera que los reguladores le permitan comprar activos de sus competidores en su país de origen, ya que está a punto de perder su estatus de mayor operador local a raíz a la fusión entre Orange y MásMóvil. Esta unión creará un operador mayor que Telefónica en términos de clientes.

Desde su privatización en los años noventa, el antiguo monopolio estatal de telecomunicaciones tenía prácticamente prohibido crecer mediante adquisiciones por los reguladores antimonopolio debido a su posición dominante en España. Además de Telefónica y Orange-MásMóvil, los otros grandes operadores de telecomunicaciones en España son Vodafone, la rumana Digi y Avatel.

A este respecto, el consejero delegado de Telefónica ha reconocido que mantiene conversaciones con Digi sobre la posibilidad de renegociar el acuerdo mayorista que la compañía rumana tiene con la operadora española y que expira en 2026, sobre todo, en un escenario en el que Digi ha sido la beneficiaria de los remedies (condiciones) de la fusión de Orange y MásMóvil impuestos por la Comisión Europea para dar luz verde a la operación.

Para que Bruselas diese el visto bueno a la fusión de Orange y MásMóvil en España, Digi cerró un acuerdo de 120 millones de euros con MásMóvil para adquirir 60 megahercios de espectro radioeléctrico en distintas bandas de frecuencia, así como un trato opcional de itinerancia (roaming) nacional con Orange. En ese sentido, Vilá ha recalcado que el acuerdo relativo al 'roaming' otorga a Digi "la opción, que no una obligación", de "cambiar de proveedor mayorista".

En esa línea, el consejero delegado ha señalado que Telefónica tiene la posibilidad de establecer conversaciones con Digi para renegociar esos contratos, "incluso con anticipación a su vencimiento en 2026".

"Estamos ya en conversaciones desde hace tiempo, anticipando los escenarios que se podrían producir en el mercado. La disrupción para un operador de cambiar de 'host' (proveedor) en este tipo de servicios no es menor. La calidad para sus clientes finales de estar en una red u otra no es un cambio neutro y nosotros creemos que podemos conseguir una renegociación, extensión o reformulación de los acuerdos con Digi que sea satisfactoria para ambas partes", ha asegurado.