El presidente del PSE-EE, Jesús Eguiguren, ha defendido una tercera vía para resolver la crisis de los socialistas tras el batacazo electoral del pasado domingo en los comicios autonómicos y municipales: ni primarias, como defiende Zapatero, ni el congreso extraordinario por el que aboga Patxi López. La solución pasa, a su juicio, porque se 'obligue' desde el partido a que Zapatero se 'replantease' su decisión de no volver a presentarse a la reelección en las próximas elecciones generales.

En los pasillos del Parlamento Vasco, Eguiguren ha aclarado que los socialistas de Euskadi no están echando  un 'pulso' a la dirección del partido por pedir un congreso extraordinario y ha dejado clara su postura: 'Siempre he pensado que Zapatero no debía retirarse, por eso la polémica actual no me interesa. Si estuviera en mi mano lo que haría (en el Comité Federal del sábado) es obligar a Zapatero a que se replantease la decisión que tomó'.

Que se celebren congreso o primarias es para Eguiguren lo de menos. Lo de más es recordar que Euskadi 'debe mucho' a Zapatero y que 'parte de su desgaste' se debe a que 'está haciendo la paz' en el País Vasco.

La salida a la crisis pasa por contar con Zapatero como candidato y celebrar elecciones anticipadas. Con una sola condición: sólo 'si se pudiesen ganar'.  Todo ello adobado con 'un poco de calma', que 'no estaría mal', ha dicho.

'Normalmente los gobiernos convocan las elecciones cuando el sondeo les dice que van a ganar, pero yo no sé si va a ocurrir eso de aquí al final de las legislatura, pero vamos a esperar un poco. Todo esto que ha pasado yo lo he visto mil veces, no ha ocurrido nada del otro mundo', ha concluido.