Detenido por segunda vez un entrenador de fútbol por agresión sexual a menores en Barcelona

Los Mossos d'Esquadra han detenido por segunda vez al entrenador de fútbol acusado de agresión sexual en Barcelona. Dos jugadoras del equipo femenino infantil del Unificació Club de Fútbol (UCF), en Santa Perpètua de Mogoda, denunciaron de forma individual los hechos. El acusado ya había sido arrestado el pasado mes de enero por el mismo delito, tras recibir la primera de las denuncias por una agresión sexual que tuvo lugar hace nueve años, cuando la víctima todavía era menor de edad. 

La segunda de las denuncias se registró el pasado 17 de abril, cuando otra jugadora del equipo, también menor, aseguró ante la policía catalana que había sido víctima de una agresión sexual en diciembre de 2022. Los Mossos investigan si pudo haber más víctimas en el mismo equipo de fútbol durante los últimos meses.

El Juzgado de Instrucción Número 3 de Sabadell puso al supuesto agresor en libertad provisional con medidas cautelares tras este segundo arresto. El acusado, de 28 años, tiene prohibido abandonar el país, acercarse a menos de 1.000 metros de la víctima y comunicarse con ella por cualquier vía. Además, también está inhabilitado para realizar cualquier oficio o actividad que implique un contacto directo con menores de edad.

En enero, cuando fue detenido por primera vez, el Juzgado de Mollet Número 4 también había ordenado libertad provisional con medidas cautelares para el individuo, que fue apartado del club tras hacerse pública la primera denuncia. Los dos casos siguen abiertos y cada uno lo instruye un partido judicial diferente porque las agresiones tuvieron lugar en dos lugares distintos.

El presidente de la UCF de Santa Perpètua de Mogoda, Francisco Torres, ha explicado que a mediados de enero la policía catalana les notificó que había una denuncia por un delito contra la libertad sexual contra este hombre. La dirección del equipo decidió entonces prescindir de él al considerar que se trataba de "una situación grave". Las agresiones sexuales se habrían cometido en el entorno deportivo, aunque no necesariamente en las instalaciones municipales.