MADRID.-Precariedad, brecha salarial y pobreza se combaten con un aumento del gasto público, y esto requiere de un aumento de la recaudación tributaria. Pablo Iglesias, líder del grupo confederal Unidos Podemos en el Congreso de los Diputados, ha presentado este lunes las claves de los "presupuestos alternativos" de su formación, que plantean elevar el gasto en 24.500 millones; unas cuentas "viables" que demuestran que, si hay "voluntad política", hay otras recetas político-económicas  distintas a las que gustan al PP. 

Y, aunque el líder del partido morado da por hecho que Ciudadanos y PNV finalmente apoyarán los Presupuestos de Mariano Rajoy para 2018, también afirma que el debate sobre estas cifras es "la discusión política más importante de un país", y toca dar la batalla en este campo.

Desde el Círculo de Bellas Artes de Madrid, acompañado por la portavoz parlamentaria, Irene Montero, el responsable de Economía de Podemos, Nacho Álvarez, y los portavoces de IU y las confluencias (En Comú Podem y En Marea), Iglesias ha destacado el blindaje a las ayudas a la dependencia, la gratuidad de las escuelas infantiles y del material escolar que proponen como medidas "de dignidad, que permiten hablar de patria", frente a un PP dispuesto a "hacer cualquier cosa" para que no se hable de sus "nefastas políticas económicas o de su corrupción". "Es vergonzoso que en España esté llevando las cuentas un partido que se financia ilegalmente", esgrimía.

Su alternativa se basa en 15 propuestas concretas, la mayoría ya incluidas en programas electorales de su formación, como la renta garantizada -con un coste estimado de 3.100 millones de euros-, la revalorización de las pensiones de acuerdo al IPC -2.200 millones- y la derogación de la reforma laboral del PP -co el establecimiento de un nuevo marco de relación entre trabajadores y empresarios-. También aboga por un nuevo equilibrio de gastos e ingresos.

En concreto, estas cuentas plantean que el grueso del aumento del gasto público vaya a la administración central -20.000 millones de euros aquí, 4.500 para las comunidades autónomas-, así como recaudar 14.800 millones más, gracias a un impuesto a las grandes fortunas -para ingresar 1.000 millones-; un "impuesto de solidaridad" a la banca -también rondaría los 1.000 millones de euros-, y otro de "fiscalidad verde", para recaudar 1.650 millones-. Además, proponen fijar el objetivo de déficit en el 3% para este año, frente al 2.2% que quiere el Ejecutivo. "No tiene sentido seguir pisando el acelerador de la reducción, es contraproducente", sostenía Álvarez. 

Las medidas desglosadas por Iglesias -incluidas en el documento Cuentas para un nuevo país-, pretenden visibilizar que el grupo confederal toma la iniciativa frente a un PP "paralizado" y marcar distancia con el resto de grupos de la oposición -especialmente con el PSOE-. Previsiblemente, estas propuestas se verán transformadas en enmiendas del grupo confederal a las cuentas del Gobierno para 2018 -como ocurrió el año pasado-, en el segundo año en el que el Ejecutivo se ve obligado a prorrogar los anteriores Presupuestos Generales del Estado por su incapacidad para lograr acuerdos que garanticen la aprobación de sus nuevas cuentas.

Montoro: "La prórroga está paralizando inversiones decisivas"

Por su parte, la portavoz del grupo confederal ha criticado que la prórroga de los Presupuestos de 2017 esté "paralizando inversiones decisivas e impidiendo el desarrollo de políticas sociales", y ha destacado que el techo de gasto para 2018 sea inferior en 62.000 millones al aprobado en 2010, ya que esta cantidad coincide con el montante de dinero público destinado al rescate bancario -del que el Banco de España da por perdidos 42.590 millones-.

Montero también apuntaba que su receta serviría para que la recuperación "llegue a los bolsillos de la gente", algo que también ha destacado Álvarez: "Necesitamos consolidar el crecimiento y transformarlo". 

Así, entre las medidas destacadas por el responsable de Economía de Podemos, destacan las actuaciones fiscales sobre las rentas más altas -dotar de mayor progresividad al IRPF, acabar con las deducciones "más regresivas", como los planes de pensiones privados-; la "digitalización de la economía"; "el crecimiento verde" -el tránsito hacia un modelo sostenible-; la lucha contra la desigualdad y, en particular, el esfuerzo en materia de igualdad. Esto pasa por igualar permisos de paternidad y maternidad, así como por un Plan de Erradicación de las Violencias Machistas dotado con 1.050 millones de euros.

Las 15 medidas (y sus costes)

-Plan de Renta Garantizada (3.100 millones de euros)

-Escuelas infantiles de 0 a 3 años gratuitas (3.000 millones de euros)

-Financiación de la ley de dependencia, para garantizar un nivel de protección mínimo que ponga fin al «limbo de la dependencia» (2.500 millones de euros)

-Revalorización de las pensiones de acuerdo con el IPC, para que no se pierda capacidad adquisitiva (2.200 millones de euros)

-Implementación de un Plan Nacional de Eficiencia Energética (1.300 millones de euros)

-Impulso (y democratización) de la digitalización de la economía (1.240 millones de euros)

-Plan de Empleo para la Juventud (1.100 millones de euros)

-Plan de Rescate de la Ciencia y de la I+D+i (1.100 millones de euros)

-Plan de Erradicación de las Violencias Machistas (1.050 millones de euros)

-Gratuidad del material escolar (950 millones de euros)

-Plan de choque para acabar con el empleo precario en las Administraciones Públicas, y oferta de empleo público extraordinaria con 20.000 nuevas plazas (800 millones de euros)

-Plan de Alquiler de Viviendas a Precios Sociales (700 millones de euros)

-Igualación progresiva de los permisos de paternidad y maternidad (400 millones de euros)
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-Plan Nacional de Movilidad Eléctrica y Transporte Público (310 millones de euros)

-Apoyo al desarrollo rural y al modelo de agricultura, ganadería y pesca social y sostenible (250 millones de euros)