El naufragio de un cayuco el pasado lunes frente a las costas de Mauritania deja un balance de 89 personas migrantes muertas, cuyos cuerpos fueron recuperados, otras 72 desaparecidas y 9 personas rescatadas, informó la estatal Agencia Mauritana de Información.

La embarcación, de gran tamaño y generalmente utilizada por pescadores, se hundió cerca del pueblo de N'diago, localidad costera ubicada al sur de Mauritania, junto a la frontera con Senegal.

Según la Agencia Mauritana de Información (AMI), se recuperaron 89 cuerpos y los guardacostas mauritanos rescataron a 9 personas con vida, incluida una niña de cinco años.

"Los guardacostas mauritanos encontraron los cuerpos de 89 personas a bordo de un gran barco de pesca tradicional que volcó el lunes 1 de julio en las costas del océano Atlántico", a cuatro kilómetros de la ciudad de Ndiago (localidad mauritana cercana al país vecino), informó la AMI.

La agencia citó a supervivientes que dijeron que el barco había zarpado de la frontera de Senegal y Gambia con 170 pasajeros a bordo, lo que eleva el número de desaparecidos a 72. Un alto funcionario del gobierno local proporcionó a la agencia AFP información similar, bajo condición de anonimato.

Ruta muy peligrosa

La ruta del Atlántico es particularmente peligrosa debido a las fuertes corrientes, con migrantes que viajan en embarcaciones sobrecargadas, a menudo no aptas para navegar, y sin suficiente agua potable. Pero ha ganado popularidad debido a una mayor vigilancia en el Mediterráneo.

Los ocupantes del cayuco siniestrado son en su mayoría senegaleses y gambianos que partieron de las costas de Senegal y probablemente se dirigían hacia las Islas Canarias, informó a EFE una fuente de seguridad de la zona.

Hasta junio, llegaron a Canarias de manera irregular más de 19.000 personas, el triple que en 2023 en el mismo periodo, y el gobierno canario teme que 2024 termine ampliamente por encima del récord de 40.000 del año pasado.

El gobierno de las islas españolas estima que hay unos 300.000 subsaharianos esperando en Mauritania para intentar llegar a Canarias.