Al menos un menor de edad marroquí permanece internado en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Murcia, conocido como Sangonera, según ha denunciado la ONG Convivir Sin Racismo, que asegura que otros dos migrantes internados en este CIE han manifestado también ser menores.

Según voluntarios de esta organización, que ha aportado una partida de nacimiento, tuvieron conocimiento de esta situación tras una visita al CIE la pasada semana. El joven marroquí, cuyas iniciales son Y. E., fue privado de libertad el pasado 14 de septiembre tras llegar a España en patera, huyendo de la persecución política en la región del Rif, en el norte de Marruecos. El documento identificativo especifica que Y. E. nació en agosto de 2001, por lo que tendría 17 años.

Partida de nacimiento del menor Y. E.

Sandra Martínez, miembro de Convivir sin Racismo, ha explicado a Público que el joven les trasladó desde el primer momento que era menor e insistió en que portaba su partida de nacimiento. La ONG localizó a sus familiares en Marruecos para confirmar que los datos que les dio el menor eran correctos y, actualmente, tratan de conseguir el documento traducido o una traducción jurada del mismo para presentarla ante el juez del control del CIE y conseguir que salga.

Al mismo tiempo, la ONG alerta de que otros dos internos procedentes de Argelia les han asegurado ser menores de edad y que están a la espera de obtener documentos de identificación que lo acrediten. Los voluntarios han localizado al padre de uno de ellos, que reside en Francia, y actualmente se está desplazando hasta Murcia con la partida de nacimiento de su hijo para intentar que salga del CIE.

Fuentes del Ministerio del Interior han asegurado a Público que están al corriente del caso del menor marroquí e insisten en que el joven nunca manifestó a los agentes que custodian el CIE que fuera menor de edad, sino que dio una fecha de nacimiento que no se corresponde con la del documento. "No ha sido hasta después de una semana cuando ha manifestado que era menor. Desde este momento, el caso se ha puesto en conocimiento de la Fiscalía de Menores y se está a la espera de que se le realicen las pruebas oseométricas para determinar su edad", explica Interior. Según estas fuentes, las pruebas podrían tardar hasta dos semanas. En caso de que acrediten que es menor, el joven saldrá del centro y pasará a estar tutelado por la Comunidad Autónoma, han especificado.

Desde Convivir Sin Racismo y otras ONG y colectivos defensores de los Derechos Humanos critican que se dé más credibilidad a esta pruebas de determinación de edad que a los documentos que portan los internos, ya que las pruebas oseométricas tienen un gran margen de error, de hasta dos años, y siempre se tiene en cuenta la franja de edad superior. La organización denuncia el "alto número de menores que pasan por este CIE cada año".