"Vamos tarde, demasiado tarde, pero aún nos queda el poder de la memoria y desafiamos la injusticia del olvido", ha reconocido este lunes el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el homenaje a todas las víctimas del golpe militar, la Guerra Civil y la dictadura franquista. El acto, bajo el lema Memoria es democracia, está enmarcado en el día fijado en la recién aprobada Ley de Memoria Democrática para recordar al colectivo.

La Sala de Cámara del Auditorio Nacional, llena hasta la bandera, ha sido el lugar escogido para albergar un evento al que han acudido, además de Sánchez, otros miembros del Ejecutivo de coalición, entre ellos las tres vicepresidentas y el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños; así como la presidenta del Congreso, Meritxell Batet; otros representantes políticos e institucionales; y familiares y asociaciones de víctimas.

Antes de la entrega de una veintena de diplomas por parte de Sánchez y Bolaños a familiares de las víctimas, entre ellas las Trece Rosas o las Sinsombrero, y al propio Alejandro Ruiz-Huerta, el último superviviente de la matanza de Atocha en 1977, la periodista Marta Fernández ha presentado el homenaje como un nuevo ejemplo en el avance hacia la democracia para que "ningún nombre se borre de la memoria". 

También, el titular de Memoria Democrática ha subido al atril para agradecer a las víctimas y a los colectivos memorialistas su lucha durante todos estos años. "Buena parte de lo que somos es gracias a vosotros", ha señalado Bolaños, quien ha recordado que la elección de esta fecha para homenajear a las víctimas no es casual, pues coincide con el aniversario de la aprobación de la Constitución en las Cortes, hace hoy 44 años, cuando "se abrió una nueva etapa de convivencia pacífica y de libertades", ha añadido.

El presidente del Gobierno ha sido el último en tomar la palabra y honrar a todas las vidas perdidas en "una guerra cruel, una dura posguerra y el rencor de una dictadura". "Por eso es tan importante construir un relato compartido a partir de todo lo que nos une", ha justificado el líder del Ejecutivo.

Asimismo, ha puesto el acento en una de las banderas que promueve la nueva ley memorialista, la que hace referencia al "deber de la memoria": "La ley nace de un relato integrador. Hemos pagado un alto precio por la liberad". Además, ha avisado de que el avance de la ultraderecha y los autoritarismo en Europa "nos recuerda que el progreso es irreversible".

En este contexto, antes de que la cantante Ana Belén pusiera el broche de oro al interpretar la canción de su compañero Víctor Manuel España camisa blanca de mi esperanza, Sánchez se ha sumado a agradecer el papel de la sociedad civil: "Gracias por mantener viva la llama, redescubrirnos historias olvidadas, como la epopeya de La Nueve, y gracias por apoyar a las familias de los desaparecidos cuando el Estado se ausentó", ha afirmado Sánchez para prometer que ahora es cuando "hay que desprenderse de viejas hipotecas".